Puede el estudiante acceder a los "textos"
pero no entenderlos por necesidad.
Puede el estudioso empaparse de las "enseñanzas" habiéndolas entendido,
pero otra cosa es comprenderlas.
Comprensión es sinónimo de integración existencial;
entendimiento lo es de integración intelectual.
Hay quienes buscan la comprensión por el entendimiento
y hay quienes acceden al entendimiento por la comprensión.
Quien comprende, vive en el reino de las relaciones analógicas consistentes;
Quien entiende, accede al flujo orden - caos por la trama causalista o probabilista en la explicación.
Experiencia es el encuentro de Madre Comprensión y Padre Entendimiento; Misión, su matrimonio. Realización es el producto, la alquimia de esta unión.
El que entiende sabe por referencia de la experiencia o por experiencia de la referencia.
El que comprende sabe por experiencia de la pertenencia o por pertenencia a la experiencia.
Quien realiza sabe por trascendencia, en la pertenencia a la experiencia de la referencia autorizada.
Las Ciencias Sagradas basan sus realizaciones en la Comprensión, con miras al entendimiento;
Las Ciencias Humanas, en el Entendimiento con miras a la Comprensión.
Quienes nada entendieron de las Ciencias Sagradas y las Ciencias Humanas construyeron un abismo entre ellas: el absurdo de su relación.
Quienes entendieron algo, las separaron por contradictorias y respetaron sus coincidencias, manteniendo la posibilidad de coordinación e intercambio.
Quienes comprenden buscan la Síntesis...
La Comprensión es el instrumento regulador para la no deshumanización materialista; el Entendimiento, para la no degeneración espiritualista.
¿Podrá aceptar alguien la posibilidad de un buen entendimiento y una mala comprensión o de una buena comprensión y un mal entendimiento asociados?
¿Podrá negar alguien la necesidad de coherentizar esta dialéctica entre entendimiento y comprensión?
A ambos caminos los liga la práctica consciente de amplio espectro.
Hacer de lo ordinario extraordinario y de lo extraordinario ordinario es su maestría.
Yoga es la cibernética de ida y vuelta.
Pero hay quienes creen que esta navegación es un ejercicio, una técnica, la pulsión de un comando - estilo "asana-yoga", estilo "solución de problemas" -:
es una adolescencia espiritual en buen camino.
Para el Sendero Mayor constituye una Misión.
Mejor aún, está contextualizada por ella.