En torno a
la importancia del
YOGA TÁNTRICO,
en Heinrich Zimmer
(A propósito de los 'demonismos' y la pretendida malignidad
del yoga, la magia, etc., desde el antagonismo religioso)

A la Divina Shakti
¡benévola y terrible en Nos!

E.M.

I. INTROITO.-

Flautista de Hammelin

Zzzzzzzzzz!!! —Dulces Sueños. En seguimiento de las notas de un flautista que ejerce de incógnito, vamos andando nuestro camino imbuidos de gran devoción, cuando de pronto nos detenemos en seco: una divisoria de aguas nos deja entrever los canales –y sus eventuales vasos comunicantes– por los que se aventuran grandes caudales humanos, mares de almas cuyo común denominador no es otro que la sed por Mysterium, Tremendum y Fascinans– los tres rayos consagrados de lo Numinoso [0]. Proyectados en el horizonte, tres de estos canales suscitan nuestro particular interés. El primero nos es presentado cual ducto mediumístico; como vía mágica, el segundo y cauce yóguico, el que le sigue. Una mirada panorámica a sus respectivos dominios nos permite entrever a los que andan por ellos construyendo, afinando y sintonizando sus instrumentos, tesoneramente, sin aparente complicación. Pero por vocación, nos sentimos obligados con aquellos viandantes que no dejan de transmitir sendos mensajes de S-O-S.

Y como es de esperarse, de tiempo en tiempo asistimos a la emergencia de "demonismos" [1], esto es, la expresión de "fuerzas" de naturaleza desconocida –"inteligentes", "voluntariosas" y/o "anárquicas" en su manifestación– que en apariencia consiguen infestar dramáticamente a ciertas personas (vg. "posesiones espirituales") [2], exteriorizarse en lugares (vg. fenómeno "poltergeist") [3] o desubicarlas de sus referentes normales de espacio, tiempo, persona, orden, causalidad, etc. (vg. "trances involuntarios", "crisis de abducción", "psicosis"). Unas veces tales ocurrencias se presentan espontáneamente y otras, en circunstancias del involucramiento de sus sujetos con entornos y prácticas "ocultistas" o las llamadas disciplinas "psico-bio-energéticas" y "espirituales".

A continuación pasamos rápida revista de las características más acusadas del repertorio de los protagonistas y sus escenarios:

En primer lugar destácase el púber o adolescente, aparentemente normal, cuya disposición psíquica arroja al análisis un fondo de tensiones reprimidas, frustración (afectos, esfera sexual, etc.), tendencias agresivas inconscientes dirigidas hacia una persona de autoridad (padre, maestro, etc.) o sus pares; y que por algún motivo no puede desahogar conscientemente. Esta personalidad constituye un buen prospecto para desencadenar demonismos en la modalidad PKER (psicocinesis espontánea recurrente, "poltergeist"), que sirven al propósito de "llamar la atención", "pedir socorro" y "restablecer la homeóstasis con el entorno". [4]

Próximo al anterior está su coetáneo que al llamado de la moda o la presión de los amigos, y sin mediar competencia ni responsabilidad por las consecuencias de sus actos, se introduce en una franja de prácticas ocultistas como son el juego de la oui-ja, la escritura automática y el espiritismo en general [5]. Éste busca huir de sus particulares circunstancias y no encuentra mejor modo de hacerlo que aspirando el "aliento del más allá". De la exposición inmediata o repetida de su "zona de fragilidad psíquica" [6] a tales menesteres, no tardarán de dar cuenta los titulares de los diarios:

Por otro lado, se encuentra aquel sujeto que intuitivamente –o luego de un sesudo cuestionamiento– decide no prestarse a canal de "influencias extrañas" y, por el contrario, se aboca a controlarlas y subordinarlas a sus personales intereses, si no a un "designio superior". Carece sin embargo de la suficiente intensidad en autoconocimiento, autodominio, los estudios y la disciplina (¡tan caros al mago!), para no hablar ya de la reverencia y devoción (propias del místico). De ello puede que se sigan algunos trastornos espirituales, emocionales y físicos. [7]

Y mientras los profesionales pertinentes (i.e. físicos, médicos, psicólogos, etc.) estudian el terreno para constatar la real ocurrencia de la fenomenología anómala o, superada esta fase, arribar a proferencias válidas (i.e. explicaciones plausibles, diagnósticos sensatos, etiologías comprensivas y las intervenciones subsecuentes más apropiadas); la opinión pública influenciada por los medios de comunicación, adelanta su veredicto. Para un número de ellos se trata de evidencia incontrovertible del "acoso demoníaco" (i.e. posesión, infestación, vejación, etc.) a los "infelices" dado su involucramiento con prácticas "sospechosas", a todas luces en conflicto con la voluntad de Dios y a las que es preciso conjurar. En lo que sigue reproducimos, a guisa de ejemplo, cierto "testimonio" que termina siendo explotado por una revista católica –y sus repetidoras– a los efectos de concientizar sobra la presunta "malignidad del yoga".

Siendo católica no practicante y tratando de superarme por el camino equivocado hice de todo, siempre con apariencia de bueno. Entusiasmada por mis amigas fui a una señora que tira las cartas, solo por curiosidad. Después comencé a leer libros de auto ayuda, un poco de metafísica, lecturas de la nueva era, etc...   Amante de los deportes y cansada de la rutina, empecé, también llevada por una amiga, a hacer yoga en una fraternidad muy conocida. A los pocos meses me fui de allí porque manipulaban la voluntad de las mujeres. Pase a otro grupo de yoga “más serio”. Unos italianos recién llegados (rishis), con maestro y todo. Allí, aprendí otro tipo de vida austera. Leí mucho sobre budismo, taoísmo, otros maestros, técnicas de yoga y nueva era en general, todo me parecía muy estimulante y nuevo.   Conocí gente distinta y todos parecían muy agradables. Durante mas de 5 años, aprendí e hice diversas meditaciones, asanas, vegetarianismo, seminarios impartidos y cobrados por el maestro, ayunos, tai-chi… todo muy interesante para el que está buscando y no conoce a Jesús. Me alejé de mi familia y del mundo. El resultado. Un buen día me desperté levitando sobre la cama... con una criatura (espiritual), como pulpo, agarrado a mi cabeza. Con juegos de palabras había entregado mi alma. Para tratar de sacarme esa cosa que me consumía toda mi energía, hice lo que no había que hacer. Busqué entre señoras que curaban o liberaban. Todas estas personas tenían imágenes de la Virgen o iban a la iglesia, así que era difícil desconfiar. También me hicieron reiki, bioenergética, energía universal y lo que se ofrece en el mercado espiritual como “alternativo”. Si había alguna mejora era sólo momentánea. Contaminación y más contaminación espiritual. Como no se ve…    Al fin, por gracia de Dios entré a la iglesia. Me llegó la salvación, primero en la Legión de María y luego al grupo de oración carismático. Sobreviví el primer año gracias a los retiros carismáticos en Padre Hurtado, Chile, mes a mes. Mi vida ha sido muy difícil desde entonces...pero siempre acompañada y consolada por Jesús y María.   Quiero compartir que vi lo que hay detrás del yoga y por quienes es utilizada. Que produce una gran confusión de valores, robo de energía y total perdida de la libertad. Que el yoga cristiano es un contrasentido. Que no se debe tener en las parroquias una práctica que utiliza la nueva era y que lleva a la soberbia y al orgullo espiritual.   Las "asanas" son ejercicios espirituales con invocaciones a otros dioses... eso es idolatría. No se puede poner la mente en blanco durante las meditaciones ni relajaciones porque es peligroso. [sigue] Fuente: http://www.corazones.org/apologetica/practicas/yoga.htm [Fragmento]

Se constata, pues, más allá de la incidencia de "demonismos", la desinformación interesada que ha lugar. Luego, el tema dista de ser trivial.

Recientemente (Nov. 2011), el Padre Gabriele Amorth, ex-exorcista en jefe del Vaticano, fundador y presidente honorario de la Asociación Mundial de Exorcistas, sorprendió a la opinión pública internacional (por no hablar ya de la "extrañeza" provocada al interior de las comunidades implicadas) con atrevidas [11] declaraciones sobre la pretendida –para él real– ascendencia satánica del Yoga y la Magia.

“Practicar yoga lleva al mal, así como leer Harry Potter. Parcen inocuos pero ambos lidian con la magia y eso lleva al mal”. Añadió que: “El yoga es obra del Diablo, crees que estás haciéndolo para estirar tu mente y tu cuerpo pero te lleva al hinduismo. Todas estas religiones orientales están basadas en la creencia falsa de la reencarnación”. Fuente: http://www.dailymail.co.uk [ver] Otra referencia: http://vaticaninsider.lastampa.it/en/homepage/ [ver]

Padre Gabriele Amorth

Semejantes afirmaciones –que no pueden reclamar originalidad al constituir una línea de prédica común a varias denominaciones cristianas–, adquieren su relevancia con la investidura del proponente; por los efectos que podrían tener sobre la opinión pública de no ser contestadas [12]. Por lo pronto, desde varios ángulos, encontramos discursos con el mismo tenor en:

Mario Bertolini —Pastor Evangélico:

EL OCULTISMO DESCUBRE LA REALIDAD DE OTRA DIMENSIÓN.- Ante todo debemos aceptar que las Escrituras enseñan que hay un mundo oculto a nuestros ojos, y que es absolutamente real. La carta de Pablo a los Efesios habla de principados, potestades, gobernantes de las tinieblas y huestes espirituales de maldad, que habitan en una dimensión de las "regiones celestes" (6: 12).Por lo tanto, el mundo de lo oculto está en una dimensión sobrenatural, y el diablo y su ejército habitan esa dimensión. Desde allí logran producir efectos sobrenaturales, los que pueden confundir a muchos creyentes, que creen que esas falsificaciones provienen de Dios. Esto es posible si el creyente no ha aprendido que el enemigo de nuestras almas es también un gran falsificador, que se hace pasar muchas veces por un ángel de luz. Esta dimensión oculta es el mismo reino de las tinieblas, que ha sido abierto a muchos seres humanos por medio de las ciencias ocultas. Las llaves que permiten al ocultista entrar en esa dimensión son las prácticas del espiritismo, la adivinación, la brujería, el chamanismo, la astrología, el yoga, el misticismo oriental, la idolatría, las artes mágicas, los fenómenos psíquicos, la teosofía, los seguidores del fenómeno OVNI, el satanismo, las sectas y doctrinas del anticristo, etc. [4:26-7]. La meta del yoga es la "autorrealización" del ser, que se convierte en dios. Aquí está el engaño de Satanás: impulsa al ser humano a elevarse como una criatura divina, en el lugar de lo que debería ser únicamente el templo de Dios único y verdadero. Esta es la religión del anticristo; y que en estos tiempos es extensamente practicada por el mundo occidental, en distintas formas de ejercicios de yoga, meditación trascendental, prácticas psico-físicas, control mental, etc. [4:70]

Mario Bertolini

Elizabeth Hillstrom —Psicóloga, Catedrática, Profesante Cristiana:

En los casos clásicos de kundalini hay razones para sospechar que los síntomas provengan de la actividad demoníaca. La mayor parte de los individuos que desarrollan el síndrome han practicado la meditación mucho tiempo, se dedican a la práctica de la meditación oriental y respaldan a la cosmovisión que la acompaña. Desde el punto de vista cristiano, las religiones orientales son idolátricas y animistas, y estimulan la adoración a muchos dioses paganos. En la Biblia se nos advierte que hay un poder espiritual real vinculado a la adoración pagana y la idolatría, y que este poder es demoníaco. (...) [13] Las personas que están profundamente consagradas a creencias y prácticas idolátricas podrían fácilmente estar abriendo su vida a un serio compromiso demoníaco. Los efectos anormales, como la adopción involuntaria de complejas posturas del yoga, la incapacidad de controlar o detener el proceso kundalini, hablar en lenguas desconocidas, manifestaciones temporales de clarividencia y otros fenómenos similares , sin duda sugieren que estamos en presencia de algo sobrenatural. Hay paralelos entre los síntomas de kundalini y los que actualmente se asocian con estados de posesión demoníaca, incluyendo la enajenación mental (ver Lucas 8.35), las oscilaciones emocionales extremas (profundo éxtasis y melancolía), estados similares al trance y períodos de inconsciencia, aparentes ataques demoníacos (Lucas 9.39), y dolores inusuales no vinculados a enfermedades o a heridas. [11:131-2]

Elizabeth L. Hillstrom

Madre Basilea Schlink —Psicóloga, Misionera Protestante, Fundadora de la Evangelical Sisterhood of Mary:

Quien practica intensamente el Yoga, caerá irremediablemente bajo la influencia de Satanás, por este fondo tenebroso que lleva el Yoga en sí, aunque sea muchas veces imperceptiblemente. Por la influencia de fuerzas del universo (Que no son otra cosa sino las fuerzas de dioses paganos) el hombre se expone al peligro de caer bajo el poder de abajo, aún si cree practicar “Yoga cristiano”. Y al final, el discípulo del Yoga pasa del reino del reino de Jesús, reino de la luz, al reino de las tinieblas, lo que uno nota de ordinario cuando ya es demasiado tarde. Pero este paso del reino de Dios al reino del demonio, tan decisivo para la eternidad, se realiza según las fuentes espirituales del Yoga. Fuente: Los Cristianos y el Yoga http://www.tiempodevictoria.com.ar/estudios/estrategia/007 [Fragmento]

M. Basilea Schilink

Mercaba: Web Católica de Información y Formación:

Recomendamos mucha cautela: -El demonio sutilmente se cuela en las prácticas yogas por estar tan relacionadas con el paganismo. ¡Cómo le gusta al enemigo de Dios que la gente se relaje y ponga su mente en blanco cuando el está rondando!. -Los centros de yoga suelen ser lugares de promoción (velada o abiertamente) para las creencias orientales, el hinduismo y la nueva era. Se ofrece literatura, otras reuniones... El ambiente va influyendo paulatinamente. -Los libros de yoga pueden incluir enseñanzas paganas . -El cristiano no debe tratar de poner su mente en "blanco", hacer "mantras" o tener "experiencias" extrasensoriales. Una mente abierta a que entre cualquier espíritu sería fácilmente penetrada por el demonio. La oración cristiana se centra en Jesucristo Nuestro Señor y nuestra mente es suya y se guarda para El. No permitimos cualquier intruso. Fuente: http://www.mercaba.org/ARTICULOS/Y/yoga.htm [Fragmento]

Es evidente que los anteriores discursos se alinean en su propensión a atribuir a las huestes demoníacas (en el sentido "preternatural" de la teología Cristiana) la responsabilidad por aquellos "demonismos" que no comprenden y que la ciencia estaría –actualmente y con el tiempo– en mejores condiciones de explicar y abordar. Si hay algo que reprenderles además de su pobreza interdiscursiva (salvo honrosas excepciones) con los referentes alternos (físico, psicológico, etc.) y el impacto (no asumido) de tales proferencias en los niveles personal, social y cultural; es el escaso conocimiento que sus proponentes demuestran tener –seguramente por interés antes que negligencia– de los marcos (doctrinal, filosófico, científico y programático) de los blancos de ataque, en sí y por sí, a los que juzgan celosamente desde la óptica fundamentalista de su propia confesión doctrinal [14].

Marchar por dicho rumbo, con todo lo tranquilizador (¡o agitador de pasiones!) que pudiera ser, nos impresiona un despropósito, ahora que el espíritu colectivo apuesta por explicaciones científicas, secularizadas, que incorporen el aporte del sujeto (psicodinámico, neurobiológico, anatomopatológico, bio-físico-químico, etc.) inextricablemente integrado al entorno (noosférico, social, electromagnético, etc.), bajo la comprensión de que las causas externas actúan a través de las condiciones internas, y recíproca. Y allí donde se precise postular la intervención de instancias inteligentes extrahumanas (desde algún laberinto de nuestro universo multidimensional, multiverso), evitar hacer juicios morales a priori. [15].

Por lo pronto, en lo que a Nos. concierne, tenemos a bien alcanzarles la siguiente moción de Luis García La Cruz:

Nada tiene de raro que mueran bajo las garras de los leones más cazadores y domadores de leones que banqueros. Tampoco piensa nadie que esto significa que los banqueros son mucho más fuertes y hábiles con los leones que los cazadores y domadores. Como todos sabemos, son éstos quienes resultan más fuertes y hábiles en el trato con los leones. Lo mismo ocurre con la magia en relación con la locura. Si el mago tiene mayor riesgo de padecer transtornos psicóticos que el químico industrial, no es algo que deba atribuirse a su menor capacidad o solidez mental. Es normal que exista un riesgo mayor de ser devorados por las fieras interiores cuando nos dedicamos a abrir esas puertas y a liberarlas con el fin de aumentar nuestro nivel de conciencia. El objetivo, claro, no es ser devorado por la fiera, sino controlarla y cabalgarla. Pero, como es obvio, acabar devorado en semejante oficio tiene una probabilidad mayor que la que presentan otros oficios. Fuente: (10:19-20).

Y a renglón seguido, apelar a la enseñanza secreta (¡secreto a voces!) del Budismo, particularmente en su forma desarrollada –el "Gran Vehículo"– y presente también en la Vedanta, que dice:

"Todos los dioses y demonios vienen de nuestro interior, aun cuando ellos parezcan aproximársenos desde el exterior". (6:32).

Entonces, acá no se pretende negar que la inmersión en las disciplinas espirituales, prácticas energéticas y/o mágicas tenga sus riesgos potenciales, que se actualizan en la experiencia de algunos sujetos. Se busca, empero, interpretar sensatamente la naturaleza de lo que entra en juego en tales ocurrencias. Ya no se trata sólo de propiciarse un camino límpido, exento de complicaciones y riesgos innecesarios (ENTREGA-RECEPCIÓN), sino de reivindicar el buen nombre de las disciplinas comprendidas (OFRENDA), cuando ha lugar, tan vejadas por la retórica antagonista que interesadamente las confunden, subvierten y deforman [16].

II. PRESENTACIÓN.-

Las disciplinas espirituales de vocación soteriológica (y toda una gama de prácticas ocultas a disposición), no constituyen mera cuestión de hobby y ni siquiera materia de éxito por ensayo y error. Su asimilación, antes que emotivista, demanda del practicante el cumplimiento de un conjunto de prerrequisitos constitucionales, actitudinales y cognoscitivos; correspondiéndole los primeros lugares al "discernimiento ilustrado" y la "perseverancia". Ahora bien, si es cierto que estas adquisiciones no se logran de la noche a la mañana; su cultivo constituye, empero, un emprendimiento irrenunciable del recorrido.

Aplicando un enfoque moderno, planteamos que la "dignidad" de una disciplina, amén de la "eticidad" y "valiosidad" de su propósito [17] culturalmente consagradas, descansa en las notas de "integralidad" y "validez". Por "integralidad" entendemos su apertura –y las respuestas que ofrece– a las diversas demandas de la vida, sin renunciar a la intensidad puesta en la consecución de su objetivo principal. La segunda nota, lo da su capacidad de consecución efectiva (eficacia) de lo que ésta pretende, al menor coste (eficiencia) de interacciones y efectos no deseados.

El curriculum vitae del viandante por las entrañas de una disciplina determinada implica su exposición dialógica, gradual y sistemática, al conjunto de componentes y experiencias de los marcos de la misma, que operarán solidariamente para empoderarle y preparar el logro final. La atención en defecto (o exceso) de alguna de estas facetas devendría, a un tiempo, desbalance, cuyo coste es ilustrado por Heinrich Zimmer, a propósito de su tratamiento de la importancia del Yoga Tántrico.

III. ADVERTENCIA.-

En esta entrega particular, nuestra mención conjunta del yoga, la magia y el espiritismo, entre otras tradiciones y prácticas, podría producir en algún desprevenido lector la impresión de que asumimos la equivalencia y/o solidaridad de las mismas. Nada más alejado de nuestra intención, por cuanto consideramos la diferencia de sus fines y medios en relación con sus marcos y a tenor del usuario [18]; que no cualquier práctica conviene a toda persona [19], y que su homologación en "última instancia" sólo tiene cabida en cierta retórica religiosa que, presuntamente fundada en sus Escrituras, las reducen a –y disuelven en– pura 'ascendencia satánica'.

Nuestro procedimiento, como se verá más adelante, va en relación con un texto del orientalista Heinrich Zimmer, que nos participa del acceso de un occidental, por vía no yóguica, a un dominio de procesos inconscientes, con un alto coste a su integridad física y psicológica [20]; allí donde el adepto acusa registro de similares ocurrencias, de su encuentro con –y asimilación de– ellas, que sin embargo no resultan destructivas en su proceso. De la fundamentación de esta diferencia, se desprende del texto del autor la importancia del yoga tántrico.

IV. PALABRAS CLAVE.-

Alucinaciones, Arquetipos, Demonismo, Heinrich Zimmer, Inconsciente, Ludwig Staudenmaier, Shakti, Yoga tántrico.

V. CAMPOS.-

Demonología, Psicología profunda, Psiquiatría, Parapsicología, Religiones comparadas, Teología, (Tantra) Yoga.

Shiva-Shakti

VI. DESARROLLO.-

La temática del Tantra –y del Yoga Tántrico en particular– resulta compleja y complicada de asir [21], tanto más si se consideran la pluralidad de desarrollos hindúes, chinos, tibetanos, e incluso "occidentales posmodernos". Si esto es verdad para el investigador entendido y el practicante maduro; más aún lo será para el estudiante bisoño (por no hablar del profano) que no se ha liberado de la estereotipia "sexológico-erótica" y "mágico-oscurantista" que es como en ambos hemisferios, Oriente y Occidente, viene siendo explotada la tradición.

Convendría pues, de entrada, documentarse con las lecturas y los tratamientos que sobre este fértil campo de interacciones entre el tantra y el yoga nos han transmitido distinguidos cultores, practicantes e investigadores de la talla de Sri Sri Anandamurti, la dupla Ramakrishna-Vivekananda, Swami Satyananda, Osho, Sir John Woodrooffe (Arthur Avalon), Heinrich Zimmer, Mircea Eliade, Georg Feuerstein, André Van Lysebeth, Maestro DeRose, Robert Svoboda, entre otros nombres. Ya curtidos, si es preciso, darle seguimiento histórico y participante.

Sri Sri Anandamurti	Sri Ramakrishna	Swami Vivekananda	Swami Satyananda	Osho	Sir John Woodrooffe
Heinrich Zimmer	Mircea Eliade	Georg Feuerstein	André Van Lysebeth	Maestro DeRose	Robert Svoboda

Por nuestra parte, cederemos tribuna a Elizabeth L. Hillstrom (autora cristiana, antagonista), que lo ha caracterizado de este modo:

La mayoría de las tradiciones intenta que sus discípulos trasciendan las 'falsas' impresiones cotidianas del mundo real. Les enseñan a alienarse del mundo físico y suspender las actividades mentales. El tantra yoga toma un enfoque totalmente diferente. Estimula a quienes lo practican a interactuar de manera activa, con el mundo físico 'ilusorio'. Creen que tales interacciones son la mejor manera de desarticular la ilusión física y poner en evidencia la unidad y la naturaleza verdaderamente espiritual de todas las cosas. En el tantra se pone mucho énfasis en aprender a controlar y manipular el propio cuerpo, ya sea mediante posiciones del yoga, mantras, respiración controlada, símbolos visuales o excitación sexual (maithuna). En este sistema, uno de los signos claros de progreso espiritual es desencadenar la fuerza kundalini o 'fuerza de la serpiente', que supuestamente yace enroscada y adormecida en la base de la columna vertebral. Una vez que se la despierta, esta fuerza empieza un proceso de 'purificación' que, en caso de culminar con éxito, permite al discípulo un contacto mucho más íntimo con el mundo espiritual. Sin embargo, si el proceso se aborta, la persona corre el risgo de quedar irreversiblemente psicótica. El kundalini se acompaña con una hueste de síntomas anormales que se describen en detalle más adelante. Fuente: [11:114-115]

Elizabeth L. Hillstrom

Luego, premunidos de una primera noción y admitida la complejidad del campo, se comprenderá que el aporte de Heinrich Zimmer que nos ocupará a continuación, no pretende exhaustividad. Busca, sí, relievar el propósito y la importancia de esta modalidad de Yoga en la comprensión del Occidental, que es un primer paso para contrarrestar la devaluación teórica y práctica de la que la tradición (en plural) viene siendo objeto. Ahora bien, allí donde el autor intenta explicarnos cómo y por qué el culto del Yoga Tántrico está dirigido hacia el inconsciente de cada ser humano; nosotros ponemos el énfasis en rescatar lo que tiene que decirnos sobre la emergencia de demonismos.

Nuestra aproximación al discurso del Yoga Tántrico, en Zimmer, distingue un recorrido de siete (7) hitos. Tales son los postulados de:

1. Un terreno de referencia: el inconsciente humano individual y colectivo.- Esta alusión al "inconsciente" es importante ya no sólo en beneficio del discurso teórico, sino a los efectos de la vinculación de su audiencia. Porque, con todo lo interesamte que pudiera ser el Yoga Tántrico en sí y para sí, subsiste la nota de su "exoticidad": aquella que se revela en la pregunta —"¿y todo esto qué tiene que ver conmigo?" Luego, el discurso del inconsciente resulta un buen inductor del metalenguaje tantra-yóguico pues, más allá de la teorización de que ha sido objeto por parte de los psicoanalistas –Freud y Jung, en primer plano– ¿quién no ha tenido experiencia directa de sus procesos aunque sólo sea restringida a los propios sueños?

Y más allá del inconsciente individual con sus impulsos y psicodinamismos, asoma la esfera del inconsciente colectivo, poblada de los motivos primigenios (arquetipos) que guían y modelan 'silenciosamente' el recorrido de la humanidad, al tiempo que recogen su cosecha [22]. Donde cada cultura, de acuerdo con su experiencia vital, se encargará de actualizar dicho registro arquetípico y a través de él le hablará a las fuerzas vivas del inconsciente y encauzará sus derroteros.

2. Una misión única: la inmersión en –y comunión con– (1).- Lo cual equivale al mítico descenso a los infiernos y el ascenso a los cielos, en aras de su conocimiento, conquista y entrega total. Este proceso al que recala el hombre común después de la muerte y luego de sucesivas existencias –y al que irrumpe sin desearlo y sin perspectiva de continuidad el enajenado mental– es llevado a cabo en vida, de modo voluntario y tenaz, por el yogui, tras un gesto de renunciación a la natural actitud con que la Shakti se conecta y proyecta al mundo exterior.

3. Una disciplina de empoderamiento para –y efectora del– logro: el Yoga Tántrico.- Que a través de sus marcos, contextos e instrumentos acusa eficacia hacia la consecución de (2).

4. Una actitud crítica orientada al logro: el modo correcto de asociación con nuestra totalidad.- El practicante que trabaja sobre sí mismo bajo el marco del yoga tántrico, acepta sin inhibición y en reverencia la totalidad de su naturaleza divina y demoníaca –en sí y proyectada en otros–, de modo tal que no es afectado por los eventuales encuentros con sus demonios, en vida o ya post mortem en los reinos intermedios, si fuera el caso.

5. Una guía o mapa para el recorrido: la mitología comparada.- En cuanto que ésta refleja la arquetípica universal y sus variantes culturales. Pues bien, en esta introducción no alienista del Yoga Tántrico, el genio de Zimmer procede a un entrelazamiento tántrico de las tradiciones del Este con las mitologías familiares al Occidente clásico y judeo-cristiano.

6. La plausibilidad del recorrido, de cara a los obstáculos y peligros que comporta.- Lo que implementará a través de la comparación de la performance y resultados de un adepto occidental (concreto) y un yogui-tántrico tipo (abstracto). De aquí se desprende la ventaja comparativa y la importancia de este particular Yoga.

7. Subproducto cognoscitivo-experiencial.- La realización de: i).- el locus de todas los predisposiciones, funciones y poderes (dioses y demonios) en Sí mismo, y ii).- la Maya (Ilusión Cósmica) y el Mundo como proyecciones de la propia Shakti.

Y el elegido de Zimmer para (6), por esta parte de la dupla, es el Dr. Ludwig Staudenmaier (1865-1933), a quien el autor presenta como un malogrado profesor de química experimental en el Lyceum de Bavaria, con formación teológica y filosófica, el mismo que haciendo honor a su curiosidad profesional se involucra en prácticas comunes al entorno mediumístico (vg. escritura automática), resultando de ello la liberación de "automatismos" (demonismos), en la forma de alucinaciones auditivas, ópticas, motoras, etc., que terminarán poseyéndolo y a los que tendrá que conjurar hasta el final de sus días. [23]

Al final hubieron demasiadas [voces]; ellas me importunaban sin buena razón para ello y contra mi voluntad. [Ellas eran] a menudo maliciosas, intrigantes, burlonas, pendencieras, enojadizas, etc. Por días ... una disputa intolerable y repugnante, contraria a mi voluntad. Y a menudo las afirmaciones hechas por estos seres probaron ser totalmente falsas. [Adicionalmente a estas] alucinaciones acústicas, como un psiquiatra las llamaría, pronto tuve otras de naturaleza óptica. La forma de comportamiento de estos seres incuestionablemente revelaba cierta medida de inteligencia independiente, pero de otro lado, su conducta era tan extraña, tan sesgada, su total actitud hacia mí era completamente contingente a mi propio estado nervioso, que obviamente las causas de estos fenómenos mágicos yacían grandemente dentro de mí mismo. En términos ingenuos, medievales, yo estaba poseído. Gradualmente, las alucinaciones individuales llegaron a ser más y más claras, y recurrían más y más frecuentemente. Al final, las imágenes visuales más frecuentes entraron en combinación regular con las correspondientes imágenes auditivas, y resultaron personificaciones definidas; las figuras que ahora aparecieron, empezaron a hablarme , a darme consejo, a criticar mis acciones, etc. // [cit. en 6:42]. ....................................................................................................................................................................................... (...) Luego yo le olvidaría por bastante tiempo, hasta que un día me impactó que un poder extraño estaba tratando de mover mi lengua de un lado al otro, o haciéndola salir. Resultó que Rounhead estaba haciendo ejercicios con el propósito de hacer "su" lengua más grande y más ágil y cada vez más móvil que la lengua de la pelota de caucho. Aunque yo reclamaba la lengua como mía, él frecuentemente intentaba desde entonces hacer ejercicios con ella... [cit. en 6:44]. ...................................................................................................................................................................................... Una vez cuando yo yacía en cama, tuve el sentimiento claro de que alguien enrollaba una cadena alrededor de mi cuello. Inmediatamente percibí un fétido olor a sulfuro de hidrógeno y una misteriosa voz interior me dijo: "Ahora tú eres mi prisionero. Nunca te dejaré ir. Yo soy el diablo".[cit. en 6:46].

Volviendo al sujeto, el Dr. Staudenmaier dista de nuestro "Adolescente-tipo", encajando más bien con el "Racionalista" y el "Mago". El primero, por rechazar de plano las interpretaciones espíritas a favor de las tesis freudianas que ven en los demonios impulsos reprimidos del inconsciente. El segundo, por aplicarse tesoneramente a su conquista, al punto de redescubrir/reproducir por cuenta propia los principios técnicos del Hatha-Yoga-Kundalini implicados en la transformación de la energía pneumática en alucinaciones auditivas y ópticas e, incluso, acercarse a la proyección real y corpórea de estas alucinaciones a terceros.

Uno debe, de acuerdo con la ley de la transformación de energía nerviosa [es decir, el Prana del Yoga, que corre a través del sushumna, la arteria espinal], aprender a conducir grandes cantidades de energía, particularmente energía muscular, de un sistema a otro y transformarla allí. Todos los magos del pasado hicieron mucho uso de esta ley de la transformación de la energía nerviosa. Toda suerte de medios, la mayoría de ellos dolorosos, tales como el hambre, el frío, la falta de sueño, la contención del aliento, ejercicios corporales innaturales, tales como la prolongada posición de rodillas, incluso la tortura, fueron usados a los efectos de ganar energía nerviosa. No obstante, no necesitamos compadecer a los yoguis indios, a los fakires mahometanos, dado que en lo principal, ellos probablemente experimentan más placer que dolor, aun cuando podemos encontrar un cierto elemento de perversión en sus métodos. Un mago científico intentará obtener energía nerviosa del lugar donde ésta está presente en las cantidades más grandes y más fácilmente explotables, es decir, de los músculos. [cit. en 6:51] ...................................................................................................................................................................................... Una vez que la alucinación empieza a ser realmente visible, uno puede entrar en un cuarto oscuro y mantener los ojos abiertos... Si desea fotografiar la imagen, la proyecta tan exactamente como sea posible en una placa fotográfica dispuesta en el lugar al mismo tiempo. Para contrarrestar ciertas objeciones al inicio, deseo enfatizar que el mago no "ve", en el sentido ordinario, la imagen óptica real que él ha creado, porque a diferencia de las imágenes reales del mundo exterior, ésta no envía radiación a sus ojos; por el contrario, la radiación proviene de sus ojos. Él percibe sólo la estimulación de su aparato visual, él siente el ajuste de los músculos de sus ojos a la distancia apropiada, por lo que el efecto para él es el mismo. Un observador externo, sin embargo, puede percibir la imagen justo como uno percibe una imagen proyectada por una lente convexa común, i.e., dentro del cono de rayos que proviene desde la lente. La imagen (o el fantasma de los espiritualistas) llega a ser visible para todos sólo cuando cada uno de los participantes en una sesión (espiritista) la proyecta al exterior desde su propio punto de vista pero hacia un lugar único prescrito por el médium. [cit. en 6:50].

El repositorio principal de estas experiencias del autor lo constituye su libro Die Magie Als Experimentelle Naturwissenschaft (la Magia como una Ciencia Experimental), publicado en 1912, el mismo que fuera previamente admitido en los Annalen der Naturphilosophie (Anales de Filosofía Natural, vol. de 1910); aun cuando la comunidad de psiquiatras lo "aprecia" mejor como una interesante autobiografía de un paciente esquizofrénico [24].

Luego, el discurso del Yoga Tántrico en Zimmer es transducido en clave psicológica, y a partir del mismo busca ganar la comprensión de un occidental sobre la "ecceidad" de la disciplina (de otro modo infranqueable, dada su proverbial esoteria); y cómo ésta incide en conjurar la emergencia de demonismos en su recorrido autorrealizador. Zimmer da cuenta del Marco del Yoga Tántrico a través de estas líneas:

1. La Unidad y complementariedad de dios-diosa [Shiva-Shakti, por antonomasia].- Lo que aplica a cada divinidad grande o pequeña del inmenso panteón hindú.

2. El protagonismo de la "Shakti" dentro de esta Unidad y su importancia subrayada en el entorno del Yoga Tántrico.- Venerada como la(s) diosa(s), de actitud calma o amenazante, que acompaña(n) a su(s) divino(s) consorte(s), la Shakti corresponde a nuestra fuerza vital, hambrienta de forma y naturalmente proyectada al exterior; de la cual la legión de dioses, diosas y demonios no constituyen sino prototipos exteriores.

3. El Mundo, en su unidad y multiplicidad fenomenológica, como expresión de la "Maya" (Ilusión Cósmica) operada por la Shakti (Divina Energía) de Dios.

4. La unidad del Macrocosmos (nivel cosmológico) y el Microcosmos (nivel humano), expresada en la comunalidad de fuerzas y procesos que los componen y a los que los hindúes denominan "dioses"; donde los "demonios" no son otra cosa que la faceta oscura de la naturaleza en consideración.

5. Nuestra complejidad constitucional que supera el dualismo clásico de cuerpo y alma.- Dado por el complejo de fuerzas/dioses encargados de sus respectivas "jurisdicciones", según lo desarrolla la tradición hindú (vg. Hastyayurveda, o libro de la longevidad de los elefantes), china (vg. Li Chi, o libro de los Ritos) y tibetana (vg. Bardo Thodol, o libro de los muertos). En Occidente se reconoce mérito a la psicología profunda por su contribución a la superación del dualismo primitivo.

6. La varianza intercultural de la experiencia localizada de el/los dioses (diosas y demonios).- Allí donde las culturas occidentales y de ascendencia judeo-cristiana emplazan a la divinidad y sus antagonistas respectivamente en los cielos e infiernos del Macrocosmos; en Oriente –y los adeptos del Yoga Tántrico en particular– lo experimentan corporalmente en las profundidades del propio Microcosmos. Otrosí, la proyección macrocósmica de la divinidad que implica su disjunción (hombre ≠ Dios), es interpretada como mecanismo psicológico de salvaguarda frente a las eventuales tentaciones del Ego de cara a una identificación –y conjunción no iluminada– "hombre = Dios". A su tiempo se disolverá la maya que funda y sostiene la distinción entre Macro y Microcosmos, Dios y Ser Humano.

7. La actualización de la totipotencialidad de la Shakti como posibilidad exclusiva de Dios, negada a la criatura (vg. ser humano) al coste de su destrucción, en tanto ésta no se haya realizado/fundido en Él.

8. El inconsciente humano como dimensión oceánica fundamental de la Shakti, con potencialidades que escapan a la esfera consciente del viviente humano.

9. El inconsciente humano como la esfera a la que hacen referencia y se dirigen el conjunto de experiencias y prácticas del yoga tántrico.- La necesidad del yoga puesta en razón de domeñar las fuerzas inteligentes, contingentemente insubordinables a nuestra voluntad, que radican en distintos niveles de nuestro organismo. Este yoga recapitula el acto cosmológico de los dioses que imponen un orden frente al caos desatado por los demonios.

10. El inconsciente como aparato que procesa y registra la información en clave simbólica, que no histórica.- Para el inconsciente profundo, los eventos reales no existen, como tampoco la historia; sino tan sólo los arquetipos. Los personajes y eventos con la suficiente fuerza para impresionarlo son asimilados a las formas arquetípicas preexistentes, inyectándoles nueva vida y margen de desarrollo. Esto da cuenta de los temas recurrentes de la mitología y religiones denunciados por los estudios comparativos; como también de la disolución histórica de los guías espirituales (vg. Jesús, Buddha, etc.) en beneficio de la perennización del arquetipo [25].

11. La guardianía de la arquetípica del inconsciente colectivo de una cultura, como rol del que participan el maestro (gurú), sacerdote y –en su defecto– el poeta genuino.

12. El rol de la guía espiritual.- Consistente en la dirección y moldeamiento del complejo de fuerzas vitales e impulsos inconscientes, a través de arquetipos personal (y culturalmente) significativos (y apropiados) para evitar la eventual perversión de aquellos (fuerzas, impulsos) en formas demónicas que consigan hacer de la vida del sujeto en cuestión un caos.

13. La universalidad de los arquetipos enfrentada a la particularidad cultural de sus variantes en espacio-tiempo.- Lo que viene a poner límites sobre la capacidad del ser humano con respecto de apropiación de /adaptación a ellos; constituyendo un veto relativo a toda forma de proselitismo misionero intercultural. [26]

14. La fluida correspondencia y retroalimentación entre las estructuras axiológicas/instituciones de la cultura y el inconsciente humano.

i).- La in-formación (determinación) inconsciente de los modelos axiológicos, desplegados en las mitologías, rituales, observancias y costumbres.

ii).- La dimensión psicagógica de las observancias y celebraciones rituales.- Ceremonias como la "ofrenda del fruto", la "marca frontal del hermano", el "rito de Savitri", la "veneración de Jamburi" (India), la veneración de los Santos (Occidente Cristiano), etc., reservadas para determinadas situaciones y públicos, sirven para preservarnos de los efectos destructivos de las fuerzas vivas, inteligentes, contradictorias e informes del inconsciente humano –bajo presión de los contenidos y circunstancias de la vida– sobre el conjunto de la personalidad (vg. locura y otros transtornos psicológicos), por el recurso al despliegue de arquetipos que las direccionan, organizan y modelan funcional, proficientemente, allí donde los recursos del consciente no consiguen llegar. [27]

15. El yoga tántrico como:

i).- la disciplina que permite al adepto accesar a las profundidades del propio inconsciente y, en el proceso, realizar cómo sus pequeños o grandes 'affairs' no son otra cosa que proyecciones (exteriorizaciones) de su interioridad.

ii).- le enseña a respetar y vivir en paz con el mundo del inconsciente; persiguiendo el modo correcto de asociación consigo mismo, que involucra por igual sus aspectos masculino y femenino, divinos (luminosos) y demoníacos (oscuros) [28].

iii).- a través de este conocimiento (i, ii) y el poder que confiere, procura fundir el demonismo de la propia Shakti en la serenidad de la Budeidad.

iv).- produce la imagen interior de la divinidad (en uno de sus múltiples aspectos, ishta devata) en el devoto (tomada del panteón local de dioses, santos y demonios); dualidad que a su tiempo (una construcción por etapas) será trascendida con la interpenetración y fusión de ambos en Uno (Samadhi). [29]

v).- Instrumentaliza a estos efectos, entre otros, las ceremonias y observancias rituales, la práctica de posturas y ejercicios respiratorios, la meditación en formas circulares (mandalas, yantras) y motivos metafóricos (la araña que teje y desteje su tela), la colocación ritual de las manos (nyasa), la repetición de los sonidos sagrados (mantras) y la diaria adoración devota (puja) exterior e interior.

16. El ingreso en Yoga Tántrico, como la renunciación a la natural actitud en que la Shakti está conectada con el mundo exterior y proyectada en él.- Lo cual implica un mirar hacia dentro de uno en vez de hacerlo hacia afuera.

17. La vida misma como iniciadora en el conocimiento del Yoga Tántrico (a falta de gurú externo), que le llega a cada quien a su tiempo, en tanto que background personal - significativo para los impredecibles caminos (temporales) de la Shakti.

18. Los demonismos como aspectos oscuros de nuestra todo-poderosa Shakti. Su desborde (a la Staudenmaier), como expresión de disputas jurisdiccionales entre las partes (yoes, fuerzas) relativamente independizadas, dada su negación (represión) activa o, visto de otro modo, la falencia del sujeto en lo que toca a la correcta asociación con su totalidad.

Al cierre de la exposición de Zimmer, tenemos que:

○ Staudenmaier adquiere dimensiones (cuasi) arquetípicas, representando a cada uno de nosotros, candidatos potenciales a alterar el balance del microcosmos que constituimos y pervertir así las divinas potencialidades de nuestra Shakti con demonismos de uno u otro tipo rayanos en el caos. Y

○ El Yoga Tántrico devela su dignidad en cuanto disciplina que a Dios consigue realizar, en el transcurso de la inmersión del adepto a su inconsciente profundo (caracterizada por la correcta asociación de aquél consigo mismo, en su totalidad sagrada, y sin desencadenar por ello demonismos en el proceso).

VII. CONCLUSIONES:

1. El tema del "demonismo", eventualmente emergente en la experiencia personal, es complejo en sus alcances privados y públicos, concurriendo a su comprensión y explicación diferentes órdenes de discurso científico, religioso, metafísico, etc., relativamente conmensurables y hasta cierto punto traducibles.

2. El demonismo puede evolucionar en manifestaciones de interés psicológico, psiquiátrico, parapsicológico y "sobrenatural", amén de sus conexiones físicas y socio-culturales.

3. Zimmer apuesta por una interpretación naturalista (opuesta a la lectura "sobrenatural") y psicodinámica del demonismo, teniendo como marco de referencia el discurso del Yoga Tántrico.

4. El abordaje zimmeriano del demonismo no es pertinente a su fundamento psico-físico (que queda velado por el cajanegrismo de la Shakti) [30] ; sí a su psicogénesis.

5. El abordaje zimmeriano del Yoga tántrico invita a concebirlo como la vía ritual, conectada con todas las esferas de la vida (sin excluir, "exclusivizar" y ni siquiera enfatizar p. ej. la faceta sexual-erótica), que nos permite realizar la sacralidad del Macrocosmos Divino en el Microcosmos Humano, bajo la constante actitudinal de procurar la correcta asociación con nuestra Totalidad ('divina' y 'demoníaca', en cuanto constitutivos de la divina Shakti en Nos).

6. El Yoga Tántrico, particularmente en sus desarrollos hindúes y tibetanos, es traducido por Zimmer en clave psicológica. Como toda traducción, este proceso resulta en pérdida (el "más allá" macrocósmico) y ganancia (el "más acá" microcósmico) de información.

7. El reduccionismo psicológico del Yoga Tántrico, en Zimmer, encuentra su fundamento en el principio de relación analógica que guardan entre sí el Macro y el Microcosmos, así como en el postulado según el cual: "Todos los dioses y demonios vienen de nuestro interior, aun cuando parezcan aproximársenos del exterior".

8. El análisis revela cómo el Yoga Tántrico provee al sujeto de un marco integral y sistemático para su inmersión en la esfera del inconsciente humano, idealmente libre de complicaciones (Nota: lo que no equivale a decir que el recorrido por esta vía en pos de la empresa unitiva esté exenta de peligros). El marco del Yoga Tántrico, pues, reduciría o anularía la probabilidad de demonismos.

9. Un sujeto que no ha conseguido una correcta asociación con su totalidad, que viva en permanente conflicto con la esfera del inconsciente (cualquiera el motivo, racionalizado o no), es más proclive de manifestar demonismos ya sea espontáneamente o en circunstancias de su involucramiento con una práctica espiritual/ocultista.

10. Conflictos de ubicación filosófica-religiosa de los practicantes de una disciplina o arte, constituyen fuente potencial de demonismos [31], de allí que debieran ser tenidos en cuenta por los educadores respectivos (i.e. consejería espiritual, filosófica, psicológica), máxime cuando la incorporación del educando sea puerta de inculturación y movilidad axiológica.

11. El tema del demonismo, más allá de su valor intrínseco, suele ser explotado por determinados discursos (e instituciones) sociales con intención proselitista, de allí la necesidad de su esclarecimiento.

12. Juzgan apresurada (e interesadamente) quienes predican la ascendencia satánica de una gama de disciplinas espirituales y ocultistas (el yoga incluído), por los eventuales demonismos que podrían emerger en circunstancias de su práctica.

13. Si aún en una disciplina (i.e. yoga tántrico) que desde su marco cultural es consciente y afronta en previsión los eventuales transtornos en el repertorio de sus adeptos, éstos pueden surgir; mucho más habría que decir y precaver de otras prácticas (v.g. mediumismos improvisados) que carecen de esta perspectiva.

14. Antes de predicar la ascendencia Satánica de un 'demonismo' particular (una proferencia psico-sociológicamente no innocua) conviene considerar su ventaja comparativa sobre la potencia explicativa y psicohigiénica de planteamientos (teorías) alternativos.

15. Antes de ponderar –y calificar– a una disciplina o práctica en razón de eventuales 'demonismos', convendría tener en consideración las existencias de previsión y abordaje de tales ocurrencias en su Marco (doctrinal, filosófico, científico y programático).

16. Finalmente, recordar la devoción y responsabilidad requeridas del adepto por cada práctica (en lo que toca a sus prerrequisitos, competencias y riesgos) bajo la perspectiva de una PERMANENTE CONCILIACIÓN (ajuste) del HORIZONTE PERSONAL con la FILOSOFÍA y el PROPÓSITO FUNDACIONAL de la disciplina en cuestión; habida cuenta que LOS CAMINOS DE LA SHAKTI SON IMPREDECIBLES.

VIII. BIBLIOGRAFÍA

○ Para esta contribución se ha tomado como fuente basal:

ZIMMER, Heinrich (1933): "On the Significance of the Indian Tantric Yoga", En CAMPBELL, J. Ed. (1960).

○ Otrosí, se acusa la revisión complementaria de la siguientes fuentes:

1.- ANÓNIMO: "Las Mil y Una Noches". Editorial TOR.

2. BENDER, Hans: "Modern Poltergeist Research —A Plea for an Unprejudiced Approach". En: BELOFF, John Ed. (1974): "New directions in Parapsychology. Elek Science.

3. ______________(1993): "Parapsicología Hoy. Hechos y Conclusiones". Ediciones Lidiun.

4.- BERTOLINI, Mario (2003): "Ocultismo, Guerra Espiritual y Liberación". Editorial Peniel.

5.- BONIN, Werner (1983): "Diccionario de Parapsicología". Alianza Editorial.

6.- CAMPBELL, Joseph Ed. (1960): "Disciplinas Espirituales". Panththeon Books.

7.- CAVENDISH, Richard (1979): "Historia de la Magia". Ediciones Lidiun.

8.- DE HABICH, Esther (1995): "Los Guerreros de Piedra. Tomo 1". Editora Gráfica Aquario.

9.- DEROSE, Maestro (2003): "Tantra. La Sexualidad Sacralizada". Editora Unión Internacional de Yôga.

10.- GARCÍA LA CRUZ, Luis (s/f): Prólogo a "Introducción a la Magia", de Franz Bardon. En: BARDON, FRANZ (1996): "Introducción a la Magia". Ediciones Mirach & Colección Año Cero.

11.- HILLSTROM, Elizabeth (1998): "Probad los Espíritus". Ediciones Puma, del CENIP.

12.- KUMAR, Ravindra (1994): "The Journey Back Home - III" En: "The Journal of Religion and Psychical Research". Vol. 17, Number 2, April 1994.

13.- _________________(1994): "The Journey Back Home" En: "The Journal of Religion and Psychical Research". Vol. 17, Number 3, Julio 1994.

14.- LABORDE-NOTTALE, Elisabeth (1992): "La Videncia y el Psicoanálisis". Editorial Paidós.

15.- MICHAEL, YOGACHARYA (2010): "The Truth about Yoga". International Yogalayam.

16.- PAVESE, Armando (1994): "Manual de Parapsicología". Editorial San Pablo.

17.- RIVÈRE, Jean (1983): "El Yoga Tántrico. Teoría y Técnicas de Meditación". Editorial Kier.

18.- ROSENHAN, David & SELIGMAN, Martin (1995): "Abnormal Psychology". Norton.

19.- SCHLINK, Basilea: "Los Cristianos y el Yoga".

20.- Revista "HECHOS MUNDIALES" Año 4 - Nº 45 - "Enigma y Tradición de las Ciencias Ocultas". Editorial Zig Zag.

IX. NOTAS.-

[0].- Numinosis. Concepto derivado de numen, creado por el teólogo y teofilósofo protestante Rudolf Otto (1869-1937), que designa la ambivalencia de lo irracional divino: al mismo tiempo provoca temor (tremendum) y atracción (fascinosum). Esta ambivalencia queda puesta de relieve también en su encuentro con lo paranormal. En Bonin, Werner Ed. (5:568). [▲]

[1].- Se instituye acá el constructo "demonismo" para referirnos a todas aquellas manifestaciones, particularmente disfuncionales y patológicas, que desde el discurso religioso (sobre todo cristiano, con independencia de su denominación) sean sospechosas de corresponderse con la intervención de entidades preternaturales (en especial, la actividad demoníaca) y que, sin embargo, podrían recibir explicación –como en efecto es el caso– dentro del marco científico. Bajo esta luz, serían demonismos tanto las proferencias de un supuesto poseído, como la actividad poltergeist, el síndrome de la fisio-kundalini, entre otros. [▲]

[2].- Para Armando Pavese, la "posesión diabólica" (en realidad "pseudo-posesión diabólica") es, entre jóvenes creyentes, la alternativa cultural al poltergeist, donde el sujeto es poseído por su propio 'yo-inconsciente-creativo-patológico' que teatraliza (hace psicodrama de) los "diablos" con los desdoblamientos de personalidad y una serie de potencias arcaicas muy conocidas de los investigadores de la psiquis humana (i.e. [para]psicólogos, psiquiatras). Asociar estos comportamientos, por exóticos y dramáticos, a una entidad angélica (i.e. Satanás) de suyo ocupada en infundir en la gente la "opción fundamental por el mal" (explotación humana, etc.) es faltar a su "dignidad"; es, mínimamente, ingenuidad. (16:65 - 68, 117 - 126). No podemos estar más de acuerdo. [▲]

[3].- El fenómeno poltergeist, asociado al psiquismo inconsciente del sujeto foco, sigue pautas arquetípicas (simbolismo de 'defensa-ataque' propio de los estadíos primitivos de la humanidad) en su presentación escalonada (raps, caída de piedras, combustiones espontáneas, autodesplazamientos con o sin des_ y rematerialización etc.), como lo ha tipificado Hans Bender (Cf. 2, 3 en bibliografía). Dado el compromiso del inconsciente que se revela con la marca arquetípica, la aproximación fundamental es –debiera ser– psicoterapéutica para el sujeto foco y sus "cómplices" inconscientes y conscientes, tanto en los casos genuinos como los fraudulentos. [▲]

[4].- La asociación temporal entre algún instrumento y/o práctica y la emergencia de "demonismos" no habla de la "malignidad intrínseca" del susodicho (una superstición más, hábilmente explotada). Únicamente da cuenta de la fragilidad psíquica del/los sujeto/s puesto/s en circunstancias especiales. [▲]

[5].- Para los psicólogos de orientación psicodinámica, los trastornos asociados con la Oui-ja, la escritura automática, etc., no están en relación con que el sujeto consiga comunicarse con –y eventualmente sea acosado y poseído por– los 'difuntos' o 'demonios' reales, como lo quieren hacer ver, a su turno, los espiritistas y religiosos; sino que la práctica constituye una ocasión propicia para que el inconsciente (sus contenidos reprimidos, frustraciones, deseos, traumas, etc.) aflore y desencadene, con el talento que le es propio, sendas manifestaciones "espiritistas" y patológicas, máxime cuando está involucrado un número de personas sugestionables en "comunión psíquica". Armando Pavese lo pone así:

La persona que acude a automatismos, con intenciones espiritistas, dialoga consigo misma, o mejor, con su propio yo inconsciente.

El inconsciente puede "tomar el control de la personalidad" hasta obligarla a realizar cosas absurdas. (16:204) [▲]

[6].- Dice Elisabeth Laborde-Nottale:

Los videntes que buscan la huella psíquica que dejan los muertos (según mi interpretación), es decir, los médiums, se exponen frecuentemente a descompensaciones asociadas al hecho de que trabajan en su zona de fragilidad psíquica. Perseverar en este ejercicio sin la mediación de un soporte a menudo los pone en peligro. (16:245) [▲]

[7].- La obra de Carlos Castaneda, a guisa de ejemplo, abunda en experiencias ultramundanas, por momentos terroríficas, en estados alternos de conciencia, a las que el aprendiz de brujo tiene que enfrentar y adaptarse; pues de otro modo comprometería, además que su permanencia en el sendero, su integridad mental, física y la propia vida. Tómese en cuenta aquí la moción de Luis García La Cruz. [ver] [▲]

[8].- Citamos a Ravindra Kumar –quien tuviera experiencia directa de la Shakti Kundalini– cuando afirma:

En mi opinión, puede haber dos razones para los efectos secundarios y desórdenes de ansiedad asociados con el despertar de la Kundalini: primero, los practicantes no están siguiendo una disciplina integrada para el camino de Kundalini; segundo, la concentración en un punto en muchos momentos de la vida es responsable del parcial despertar de la Kundalini, sin el conocimiento de la persona en cuestión. En el caso de una mujer, el nacimiento de un niño puede gatillar el despertar. (13:78).

a la vez que destaca cuatro áreas que un [marco programático] debería considerar de cara a la activación funcional de la Kundalini. Ellas son: (i).- Ejercicios yóguicos, (ii).-Meditación, (iii).- Lectura de historias de personas espiritualmente realizadas y (iv).- Vida sexual regulada, dependiendo de factores y variaciones personales. Sostiene que el descuido en cualquiera de esas áreas condicionaría la tendencia de la energía a dispararse en tal dirección y causar desórdenes y efectos secundarios ("demonismos", en nuestra jerga). Dice:

Los ejercicios yóguicos son necesarios para construir vigor físico y el poder de concentración requerido para largas horas de meditación. Aquellos que descuidan esto experimentan posturas yóguicas espontáneas en tanto el poder es despertado. Aquellos que descuidan la lectura y el estudio es probable que sufran desórdenes mentales, problemas emocionales, pánico o ansiedades. La lectura de historias de gente realizada prepara a uno contra los peligros y flaquezas del camino y también trae estabilidad emocional. El sexo regulado es necesario porque la fusión de los aspectos masculino y femenino es lo que trae la transformación de la consciencia del nivel físico al espiritual. De acuerdo a mi estudio, los practicantes casados han sido más exitosos, y han experimentado menos problemas, que las personas solteras. Esto aplica igualmente a un aspirante masculino y a uno femenino. (13:79). [▲]

[9].- Debemos a Elizabeth Hillstrom una relación "pesimista" de los síntomas de la Kundalini en "meditadores avanzados", que incluye a los siguientes: dolor intenso, sensación de flujo de energía, intensos fríos y calores, hormigueos y otras parestesias, contracciones musculares, temblor y movimientos involuntarios, adopción espontánea y automática de posturas yóguicas complicadas y movimientos de animales; risa, llanto, alaridos y silbidos descontrolados, hablar en lenguas, cantar canciones desconocidas, pensamientos extraños, oscilación emocional entre la beatitud y el éxtasis por un lado y el temor, depresión, ansiedad e ira, por otro; experiencias fuera del cuerpo, clarividencia y telepatía, que en conjunto tienden a desastabilizar psicológicamente al sujeto al punto de recibir éstos hospitalización por psicosis. (Cf. 11:125-7). [▲]

[10].- Es conocido el hecho de que los procesos de transformación (profunda) del individuo suelen ir acompañados de crisis, eventualmente dolorosas, como lo ilustran p. ej. las "crisis iniciáticas" de los chamanes, las "crisis curativas" de los usuarios de Medicina Natural Hipocrática (MNH) y, por supuesto, la "crisis de la Kundalini" entendida como efectos secundarios de la purificación que pone en marcha la practica del Yoga externo e interno. Obviamente, siempre existe el riesgo de cursos disfuncionales que ameritan prevención y vigilancia. [▲] Elizabeth Hillstrom lo expresa de esta manera:

[M]ientras kundalini está ostensiblemente abriéndose camino a través de hipotéticos 'bloqueos' en las diversas chakras, el proceso no es en absoluto sublime. Según los entendidos, puede producir un increíble conjunto de síntomas dolorosos, atemorizantes y destructivos; además puede llevar semanas o meses hasta que el proceso culmina. En la bibliografía tántrica, estos síntomas se explican como consecuencias secundarias normales del proceso de 'purificación' que pone en marcha la fuerza kundalini. [11:125-6]

Sin embargo, pésele a la propaganda antagonista, tenemos que una disciplina (Yóguica, etc.) bien llevada no tiene por qué conducir a su meta a través de eventos aparatosos. Allí radíca una nota de la "dignidad" de su Marco (la "eficiencia"). Mientras más aparatoso el proceso, lo natural es inferir que el sujeto no ha pasado por la disciplina; o bien, no se ha beneficiado de ella debido a un enfoque deficiente, desbalanceado, etc. A nuestro juicio, quien lo ha expresado de modo más contundente es Osho:

[11].- El lector estará en mejores condiciones de darse una idea del tamaño de este "atrevimiento", si considera estas palabras de Jean Rivière:

A menudo se ha escrito que el Yoga es una "Escuela", un "sistema filosófico", una "forma religiosa" del Asia. Por lo que he podido juzgar en el lugar, se trata de una cosa muy distinta. El Yoga es la base indiscutible de todo desarrollo espiritual, de toda forma religiosa en Asia. (17:19). [▲]

[12].- Según la nota periodística (ver más abajo), comentaron las declaraciones del padre Amorth, Vanda Vanni, de la Asociación Italiana de Yoga y Giorgio Furlan, que dirige la Academia de Yoga en Roma. La primera dijo:

"¿Una práctica satánica? Perdón por el juego de palabras, pero ésa es una acusación sin pies ni cabeza. La acusación del Padre Amorth carece completamente de fundamento.

"Decir eso es una afrenta. -Yoga no es una religión sino una disciplina espiritual. Es acerca de la libertad y una búsqueda del ser interior. No toca a la religión y no tiene que ver nada con sectas satánicas ni estimula a la gente a unírseles".

Fuente: http://www.dailymail.co.uk [ver]

Por su parte, Furlan se expresó de esta manera:

"Hay algunos caminos de yoga que conducen al hinduismo, otros son más filosóficos, pero el suyo no es un vínculo directo con la religión y ciertamente no con el Satanismo.

"Decir tales cosas muestra que no tienes idea sobre lo que estás hablando - El yoga controla impulsos violentos del sistema nervioso y el subconsciente - para ser honesto conmigo, éste tuvo el efecto de acercarme más a la Cristiandad y en particular a la Iglesia Católica que yo había abandonado de muchacho. [▲]

Fuente: http://www.dailymail.co.uk [ver]

[13].- El desmedro de otras religiones en favor de la profesada por el proponente es considerado como modelo de virtud desde un paradigma axiológico que favorece la exclusividad. Sin embargo, cabría considerar otros puntos de vista. El Profesor Ravindra Kumar Ph.D., lo pone de esta manera:

"Quien vea una diferencia esotérica entre varias religiones y considere su enfoque mejor que todos los otros está un millón de millas lejos de Dios. A través de tal enfoque uno podría encontrar una deidad particular en alguno de los planos astrales pero no la Suprema Realidad por encima y más allá de ellas". (12:144). [▲]

[14].- Cierto es que las Escrituras Judeo-Cristianas acusan un antagonismo declarado –al punto de la condena– hacia el ocultismo y la magia, sobre todo en lo que tiene que ver con las religiones llamadas "paganas". Basta considerar los textos de Levítico 19:31, Deuteronomio 18:9-14, Isaías 44:25, Hechos 19:19, Gálatas 5:20, entre otros, para llegar a esa conclusión. Pero haríamos bien en preguntarnos si esto se debe a una malignidad intrínseca de la magia (por lo menos, de toda magia) o a sus costes para el proyecto teocrático del que participaran los pueblos hebreo y cristiano. (Es notorio que la actitud mágica no se caracteriza precisamente por mostrar sujección a las religiones oficiales).

Richard Cavendish lo expresa en estos términos:

La magia y la adivinación fueron condenadas por el Antiguo Testamento, pero, como de costumbre, a lo que se refiere es a las prácticas mágicas privadas y no autorizadas. La magia autorizada la practicaban los profetas y los sacerdotes que eran instrumentos de Dios, como Moisés y Aarón cuando vencieron a los magos egipcios en la contienda ante el Faraón. Moisés separó las aguas del Mar Rojo con su vara mágica y extrajo agua de una roca en el desierto, pero estas maravillas eran actos de Dios. Desde un punto de vista externo, especialmente el de un egipcio, Moisés era un mago poderoso y claramente siniestro. Desde el punto de vista de un israelita, era un santo y sirviente de Dios. (7:68).

Y en otra parte R. Hechos Mundiales (20:14) encontramos esta relación:

Además fue este pueblo [los hebreos] el mejor comentarista y propagandista de la magia, pese a que la religión judía fue la única de los tiempos antiguos que la repudió expresamennte.//

La Biblia condenó las prácticas mágicas considerándolas perniciosas, pero en el judaísmo primitivo se encuentran sus huellas: la serpiente de bronce fue el remedio contra las mordeduras de los reptiles del desierto en el largo viaje hacia la Tierra Prometida. También están las predicciones de los Profetas, basadas en la trayectoria de las flechas; el rito del macho cabrío, al que se carga con todos los pecados de Israel; la mágica toma de la ciudad de Hai, que aparece en Josué; Saúl que consulta a la pitonisa de Endor, durante la invasión de los filisteos; Manasés instituyendo los nigromantes, y los dos dados sagrados "tummin" y "urim", utilizados para la adivinación.

Luego, es comprensible el rechazo de cierto sector de personas hacia todo lo que se distancie de su sistema de creencias y parezca acercarse a lo oculto (que calificará de "idolatría"). Pero no tiene que ser imponible ni vinculante dicha actitud. [▲]

[15].- Si bien la tendencia dominante de los investigadores va por explicaciones naturalistas, animistas y socioculturales (límite del conocimiento científico) antes que espiritistas (esfera de la experiencia ocultista, religiosa y el discurso metafísico); tenemos que la complejidad de cierta fenomenología (en los entornos de canalización, posesiones espirituales, poltergeist, etc.), pone en tela de juicio la completud de tales explicaciones y no termina por descartar categóricamente instancias de intervención de entidades inteligentes (i.e. experimentadores ultradimensionales, espíritus de alto o bajo rango, huella psíquica de difuntos, etc.) operando a nivel de la mente subconsciente (en sinergia con –e indistinguiblemente de– los propios desarrollos del sujeto en cuestión) a la que tendrían acceso desde algún plano, dimensión o esfera del multiverso. ¡Un golem abierto a la investigación espiritual o la especualación! [▲]

[16].- Característico de la narrativa ideológica (vg. ideología en las religiones) es reflejar caricaturizados, descontextualizados, sobredimensionados o subvaluados los puntos de vista de la otreidad, haciéndolos más lábiles a la crítica. [▲]

[17].- Cedemos a la instancia de la lectoría el derecho de evaluar (materia de opinión, que no de hecho o norma) sobre la valiosidad 'en sí y entre sí' de un complejo de práctica, disciplina y doctrina que, desde sus marcos, busca mitigar la ansiedad ante la muerte y dejaría puerta abierta a la intervención de las "entidades desencarnadas" en los asuntos de los vivos (mediumnidad, espiritismo, espiritualismo); de otro que persigue un cambio conciencial, existencial o material como resultado de la voluntad del operador empoderada ritualmente (magia, en general); y finalmente de aquella que procura la comunión con/disolución en lo Absoluto, equivalente a la liberación de la "ilusión cósmica"(Yoga). [▲]

[18].- Un libro, destinado naturalmente a registrar información útil para ser socializada en los ámbitos educativo y cultural, puede ser utilizado alternativamente para adornar una estantería, servir de apoyo mecánico a la rutina de un deportista o, incluso, ser víctima de la ira acumulada de un sujeto. En esta línea, se sabe de médiums que aplican el yoga para sintonizarse con su práctica particular, aunque desde el marco yóguico, ambas disciplinas no acusen precisamente compatibilidad. [▲]

[19].- Hay que distinguir las incompatibilidades asociadas al temperamento del practicante, de aquellas que se dan entre prácticas (vg. dos técnicas de meditación) a un tiempo y para un propósito dado, y las interdisciplinarias (vg. yoga y mediumnismo, desde la perspectiva del yogui). [▲]

[20].- Lejos estamos de afirmar acá que los chamanes, médiums, psíquicos y canalizadores, entre otros embajadores de la esfera ocultista, deban considerarse sujetos patológicos, por el mero parecido que sus comportamientos profesionales característicos –asociados a los estados alternos de conciencia que cultivan y ciertos moldes culturales– tienen con determinada nosografía psiquiátrica, como alguna vez fuera visionado desde el modelo médico reduccionista. Sí es cierto, empero, que en algunos sujetos estas prácticas podrían traer secuelas negativas (i.e. trastornos psicomentales, conductuales), como lo ilustra el caso de Staudenmaier, y cuyo 'diagnóstico' y abordaje amerita del juicio profesional bien establecido en emergencias psíquicas y espirituales. [▲]

[21].- A modo de reflejar un ángulo de la complejidad de este campo, citamos al Maestro DeRose, quien distingue entre "Tantra", "Tantra Yoga" y "Yoga Tántrico".

Tantra, o Tantrismo, es la filosofía expuesta en los Tantras, escrituras hindúes cuyos orígenes se remontan al período dravídico, hace 5.000 años. Fueron escritas (pasadas al papel) mucho más tarde y popularizadas en el siglo VIII de la era cristiana; sin embargo, su contenido se basa en textos de transmisión oral de miles de años de antigüedad.

Tantra Yôga es una rama de Yôga especialmente dedicada a seguir los preceptos, conceptos, técnicas y prácticas fundamentadas en el Tantra.

Yôga Tántrico es cualquier rama de Yôga que acepte y cumpla los principios tántricos y que, en consecuencia, no sea de fundamentación brahmácharya. Por ejemplo: el Hatha Yôga, el Swásthya Yôga, el Tantra Yôga y el Urdhvaratus Yôga, son todos Yôgas tántricos.(9:22). [▲]

[22].- Sobre la importancia del "inconsciente" en el despliegue del comportamiento y la vida humana, se ha pronunciado el vate mexicano Amado Nervo en su poesía intitulada "el Subconsciente". [Ver] [▲]

[23].- A la hora de su muerte, acaecida el 20 de agosto de 1933, Staudenmaier todavía estaba en plena batalla contra los demonios que amenazaban su microcosmos con anarquía.

"Yo continúo mi trabajo con desesperada energía, pero es muy lento y difícil. Aunque los cuatro centros recalcitrantes han recibido amplios reveses en sus personificaciones, en parte de cada uno de los otros centros y en parte de mí, ellos retroceden una y otra vez en sus viejos errores, por lo que perseverar en esto realmente toma la paciencia de una oveja..."—escribió a un amigo. (cit. en 6:54)[▲]

[24].- El Diccionario de Parapsicología de Werner E. Bonin apunta:

Los cuadros de estados psíquicos de S. [Staudenmaier] se encuentran, desde el punto de vista nosográfico, entre la esquizofrenia y la psicosis mediumística. (5:748).

Dando cuenta de la Psicosis Medumística y su instalación:

Enfermedad psíquica que puede tener su origen en prácticas espiritistas. La génesis de una p.m. puede tener lugar de la siguiente manera: el paciente extrañamente ha recibido mensajes inteligentes con ayuda de una plancheta, que consideraba inicialmente tan sólo como una especie de juego de sociedad. Debido a la tendencia de personificación del inconsciente, parece que una persona es el autor de estos mensajes; quizás hasta se presentan en ellos informaciones de PES. Esto que el profano en ps. profunda no comprende, le provoca una conmoción afectiva de la cual ya no sabe escapar. El "espíritu" que habla a través de la plancheta se convierte en una instancia superior que decide todas las cuestiones; es decir que quedan excluidas instancias fundamentales del hombre (en el lenguaje del psicoanálisis: vastos campos del super-yo y del yo). Entonces empiezan las ideas demenciales, alucinaciones, obsesiones, obsesiones, etc.

Al tiempo que atribuye a Hans Bender el esclarecimiento de la relación funcional de la p.m (también "psicosis psicográfica", de psicografía = escritura automática) con el automatismo psíquico y la separación de la p.m (como "psicosis psicogénica transitoria"), de la esquizofrenia:

"Mientras que la perturbación esquizofrénica del yo y los automatismos que la caracterizan, aparecen como síntoma de una perturbación fundamental que ataca el núcleo de la personalidad y que probablemente es inevitable, se puede considerar a la perturbación psicógena (histérica) del yo como una desintegración de la personalidad comprensible, deducible, funcional y reversible. Esta desintegración no hace pedazos la psiquis, sino que aporta independizaciones funcionales de sistemas parciales, que actúan más o menos por separado, y que más bien justifica un cuadro de procesos de conmutación en un organismo multidimensional, que el de un desdoblamiento" (Bender)

Concluyendo con esta importante nota:

Hay que advertir que la p.m. también puede ser considerada como neurosis. (5:672-3).

A su turno, Armando Pavese nos ilustra también sobre la instalación de la "Psicosis Mediumística":

En efecto, en la personalidad "ficticia" existen componentes de los miedos, creencias, supersticiones, sentidos de culpa del sujeto, que pueden emerger a través de estos automatismos inconscientes. A continuación aparecen alucinaciones auditivas que dictan literalmente lo que la persona debe escribir. Más tarde ya la persona no debe escribir, ya no tiene necesidad, porque la voz le dice todo lo que debe hacer, y lo hace en forma directa.

Llegados a este punto, el inconsciente ya ha invadido la personalidad y la posee. Es un caso de "psicosis mediánica". (16:205).

Otrosí, en Staudenmaier se verifica la integración de sendas alucinaciones auditivas y ópticas en 'yoes' diferenciados ("Su alteza", "el niño" y "Roundhead"), que pugnan y se turnan en poseerlo. Para que el lector se dé una idea de la complejidad del cuadro, le participamos la siguiente distinción y relación entre "Esquizofrenia" y "Trastorno de Personalidad Múltiple" (denominada al corriente "Trastorno de Identidad Disociativo"—DSM IV), tomada de D. L. Rosenhan & M.E.P. Seligman:

La personalidad múltiple es comúnmente confundida con la esquizofrenia por el lego. Esto es debido a que se piensa erróneamente que "esquizofrenia" refiere a una "personalidad escindida". La esquizofrenia realmente se refiere a la escisión de un proceso mental, tal como la emoción, de otro tal como el juicio, más que a la escisión de una personalidad entera de otra. La esquizofrenia (...), se caracteriza por la incoherencia del discurso y el pensamiento, alucinaciones, delusiones, y emoción embotada o inapropiada, junto con deterioro en el trabajo, las relaciones sociales y el cuidado personal. El individuo con personalidades múltiples, por otro lado, puede no mostrar ninguno de estos síntomas. La personalidad múltiple se diagnostica meramente por la existencia de dos o más personalidades bien desarrolladas en la misma persona. (...). Mientras algunos esquizofrénicos pueden tener también múltiples personalidades, y algunos individuos con múltiples personalidades pueden ser esquizofrénicos, los dos desórdenes son distintos. (18:301-2). [▲]

[25].- El argumento de Zimmer apoya pero relativiza la realidad histórica de Cristo y el Buddha en vista de la lógica (los juegos) del inconsciente y el proyecto anti-egoico de los vehículos (Vg. Mahayana, para el Budismo); pésele esto a los ideólogos del conocido documental "Zeitgest - I", quienes a partir de la constatación de las constantes arquetípicas de fundamento astrológico, asimiladas por estas dignidades, asumen –énfasis especial puesto sobre el hijo de María– su inexistencia histórica. Dice Zimmer:

"Cristo y el Buddha han entrado como arquetipos en el inconsciente occidental y oriental; sus vidas históricas tuvieron tal poder que se superpusieron ellas mismas a una imagen ya existente en el inconsciente, como variante y desarrollo. Es característico de su rango histórico que ellos pudieron entrar en formas arquetípicas más antiguas, pre-existentes, las cuales reemplazaron y adaptaron a sí mismos —Cristo en la antigua figura oriental del moribundo, sacrificado y resucitado dios de las estaciones; el Buddha en el antiguo dios sol indio. Porque por propio derecho ellas poseyeron tal estatura que sólo estas formas eminentes, venerables pudieron cubrir y preservarlas a través de las eras, devino su función histórica inspirar al inconsciente de los hombres, remotos de ellos en el tiempo, tocar su imagen interior en nosotros con su imagen exterior, como si fuera con un dedo mágico, dador de vida, y despertarlo del profundo sueño para que pueda guiarnos y transformarnos en emulación de sí mismo. Al fusionarse con los arquetipos más antiguos, el inconsciente, en una solemne asunción, reunió sus figuras históricas entre los símbolos eternos, y los colocó entre las constelaciones en el cielo nocturno de las almas de los hombres.

"La pregunta erudita si Cristo y el Buddha fueron figuras históricas o "sólo" la transferencia de fragmentos de un complejo mitológico al plano histórico, pierde su significado en esta perspectiva [i.e. la del inconsciente]. Que estas dos presuntas figuras históricas pudieran ganar tal poder mitológico argumenta en favor de su realidad histórica. El inconsciente no puede ser alimentado de invenciones y fabricaciones; "Todas sus obras son verdad", dice Nabucodonosor, quien hubo experimentado los trabajos del inconsciente tan drásticamente en su propia carne...

"Debido a que el inconsciente le otorgó tanta vida, Jesús es llamado el Hijo de Dios, justo como Hércules, en razón de la misma fuerza, devino para los griegos el hijo de Zeus, y Krishna para los Indios un fragmento encarnado del Dios Universal" (6:24).

Y sobre el pertinente cuanto paradójico no-existir físico del Buddha, para los Mahayanas (extensible a Cristo) se pronuncia:

Si hubo un Buddha real, que una vez vivió en la tierra o eternamente en algún cielo al cual aspira el lego —entonces el ego también sería una realidad última. Pero la verdad a la cual uno debe llegar es precisamente que el ego es sólo una emanación de lo insondable y sin nombre, un fantasma creado solamente por el impulso con el cual éste se aferra en sí mismo; esto es lo que debe experimentarse y saberse.

Para el inconsciente profundo, los eventos reales no existen, no hay historia, sino sólo símbolos que éste destila de todas las ocurrencias; este no recuerda una onda en particular, sino cada forma que las ondas pueden tener. El Budismo habla en el plano del inconsciente cuando enseña que nunca ha habido un Buddha. El adepto del Yoga Budista se entrega a sí mismo en oración a un símbolo puro en el conocimiento que el origen personal e histórico de este símbolo es tan falto de importancia como su propio ego, que resulta de su propia imperfección. Pero este símbolo de perfección única, el Buddha, le ayuda a despertar la Budeidad oculta en sí mismo, y ésta es la única realidad. (6:25). [▲]

[26] Aquí funda Zimmer la plausibilidad de un (Bhakti)Yoga-Cristiano. Dice:

Adorar este Cristo dentro de nosotros, y sólo dentro de nosotros, y no en algún paraíso sobre las esferas celestiales, empaparnos con él evocando su presencia interior, desarrollando su enorme potencialidad en nuestra propia realidad más personal —esto sería una verdadera "imitación de Cristo". Luego, adorarle, confiando en su gracia, es decir, en la fe de que él realmente dormita dentro de nosotros y en nosotros puede se resucitado, sería un bhakti-yoga cristiano. (6:24).

A este respecto conviene recordar que entre los cultores del Yoga existen tres posturas claramente definidas:

1.- Quienes restringen la posibilidad de Yoga al proyecto soteriológico/espiritual/esotérico de las tradiciones, filosofías o religiones asiáticas (hinduísmo, budismo, sikhismo, etc.).- Fuera de éste, no es posible hablar de Yoga propiamente dicho.

2.- Quienes lo independizan de todo fondo doctrinario.- Ora trascendiéndola:

"Yoga no es una religión, Yoga es una Ciencia Universal enraizada en el pensamiento indio, etc. pero trascendiendo todas las religiones, filosofías y puntos de vista sociados (como lo plantean, por ejemplo, Sivananda y Taimni) Es materia de práctica y experimentación personal; que no especulación".

Ora reduciéndola, al mejor estilo positivista, a un conjunto de técnicas y series de posiciones y gestos corporales, respiración, relajación y meditación, que pueden explorarse por sí mismas o asimilarse a cualesquiera marco de desarrollo personal. Y

3.- Quienes la cimientan y asimilan interdoctrinal e interculturalmente, sobre la comunalidad arquetípica y los fundamentos científicos comunes a toda religión verdadera.

Un Yoga Cristiano constituiría de este modo una negación en (1), sinsentido en (2) y oportunidad/posibilidad e incluso necesidad en (3). Por su parte, el cristianismo institucionalizado adoptaría hacia un yoga tal el equivalente de (1); rechazaría (3) y problematizaría también el yoga en su versión (2). [▲]

[27].- En la novela "los Guerreros de Piedra", de Esther de Habich [Ver], Chic'ya, hija de Inka Rok'a, hermana y esposa de Manco (Yawar Wakaq), no pierde oportunidad de mostrar su rebeldía ante las frecuentes festividades y observancias celebradas en el imperio (por momentos rayanas en la solemnidad y rigidez) máxime cuando la mayoría de los participantes –incluyéndola– desconocen su propósito y fundamento. El Inka, su padre, la instruye a este tenor invocando razones de compensación del bienestar social, razones de orden astrológico-ritualístico y de beneficio energético individual/colectivo y razones de preservación/perennización social de la Ciencia (veto a los pseudorreformadores). Cf. (8: 120). A la explicación ofrecida podríamos añadir las razones de "psicagogía del inconsciente" según el desarrollo de H. Zimmer en el citado ensayo sobre el Yoga Tántrico. [▲]

[28].- La veneración en el Yoga Tántrico a ambas, las fuerzas divinas y demoníacas de nuestro interior, como deidades personales tutelares, no tiene que ver con la presunta promiscuidad moral de sus practicantes, ni con el sacar ventaja del mejor postor cuando de ejercer influencia sobre el mundo (¡magia negra!) se trata. Es simplemente el sensato reconocimiento de la polarización de nuestra Shakti cuanto la correcta asociación con la totalidad de ella; puesto que aquel que sus ojos cierra a –y reprime– una de sus naturalezas (en particular, la oscura), a su tiempo la proscrita le demostrará su existencia de un modo monstruoso (léase: "demonismos"). La experiencia de los santos cristianos permanentemente importunados por el demonio, o la del mismo Staudenmaier, ilustra holgadamente esta situación. Otrosí, el rechazo de Cristo a los fariseos, su contacto con leprosos, prostitutas, ladrones (i.e. aquella parte de nosotros que rechazamos) y su llamado a "ser como los niños" (no por inocentes, sino por el hecho de vivir su totalidad) apoyan la lógica de este yoga. [▲]

[29].- No se debe entender esto como que el Yoga busca transmutar al hombre en Dios a través de un conjunto de operaciones y técnicas. El Yoga nada tiene que ver con la construcción de la divinidad humana (¡un disparate total!) sino con la deconstrucción de la maya (i.e. ilusión) de su humanidad disyunta, de cara a la realización (i.e un estado IN-sistencial de la consciencia) de su participación en la naturaleza divina, ora comunión, ora disolución en ella. [▲]

[30].- A guisa de ejemplo, para dar cuenta de los aspectos físicos de los "demonismos" de la actividad poltergeist, se ha adelantado la hipótesis de la injerencia del agente o foco de PKER sobre la llamada "Energía del Punto Cero", y el constructo "Campo Psi" que permite un acceso científico-matemático a la fenomenología. (William G. Roll y colbs.). También tenemos argumentos basados en la Termodinámica del No-Equilibrio de Prigogine (P. Brovetto y V. Maxia). [▲]

[31].- En su libro "The Truth about Yoga" (La Verdad sobre el Yoga), el Yogacharya Michael de la International Yogalam, plantea que usualmente la gente (instructores incluidos) se aproxima al Yoga Moderno como una suerte de 'stretching', o la heredera de los aeróbicos, y que la proliferación de nuevos estilos se debe a la falta de comprensión de los fundamentos del Yoga, que va de la mano con nuestra tendencia (¡muy humana!) de cambiar para mejor, antes que nosotros mismos, a la disciplina en cuestión. Cf. (15:9-12, 14-17). Nosotros difícilmente podríamos disentir. Pero a la hora de buscar razones para esta subvaluación del Yoga (orientada al mercado y al consumo), consideramos que un factor crítico es, para no poca gente, su temor (comprensible, si incluimos el discurso antagonista ) de involucrarse con sectas o introducirse muy profundo en materias filosóficas y religiosas que pudieran ponerlos en conflicto con sus creencias nucleares y estilos de vida.

Por lo que hemos aprendido de Zimmer, 'albergar-conflictos-en-el-inconsciente' no es opción que pueda permitirse un yogui en formación, habida cuenta de los psicodinamismos (y demonismos) que podrían desencadenarse. [▲]

Desarrollado por: Eduardo Mendoza M.
Urania Scenia & Itipcap,
Lima, abril de 2012.

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