Cuán feliz oportunidad
para avivar la luz de este altar
aquella la de dialogar
con un alma hermana
y percibir a través de sus ojos el mundo,
y con su propio hálito interrogar nuestra consciencia de él,
y a través de sus latidos re-sentir el supremo OM.
Cara a cara Dios está resollando.
VS → VB.
Ir a: [1] [2] [3] 001.- Constantemente me preguntan y me pregunto yo mismo qué es el Yoga. Quisiera conocer tu punto de vista.
◘ En Scenia preferimos visionarlo como una actitud y propósito que se hace de la vida toda del individuo concientizado, con miras a su despertar (Samadhi), antes que como un cuerpo variopinto de técnicas y doctrinas. Como actitud nos reporta a la universalidad, unidad e identidad con la fuente prístina de todo: el Absoluto.
002.- Mi tía afirma ser entusiasta del yoga. Acude al gimnasio diariamente y ha desarrollado gran flexibilidad y estilo. Sin embargo sus intereses se limitan a la salud, la estética y el liderazgo. Ella no toca más fondo porque teme entrar en conflicto con sus ambiciones empresariales y creencias religiosas. ¿Es legítimo considerarla una practicante de yoga?
◘ Tengo dos respuestas a esa pregunta: La primera será un "no", sensu estricto. Es practicante de una disciplina psicofísica integrante, asociada a o derivada del yoga; lo cual no quita que una concientización ulterior le permita incardinarse al marco yóguico. La segunda será un "sí", relativo, con el atenuante de ser este yoga de corto aliento, orientado a la triada física - emocional - mental. Y, adicionalmente, no está liberado de preconceptos.
◘ Esta bivalencia en nuestro juicio considera un aspecto práctico: en este mundo picaresco que no sabe de derechos, se ha querido patentar posiciones y técnicas yoga (legado indio, patrimonio de la humanidad) como atribuídas a privadas autorías y constitutivas de otros sistemas. Tamaña amenaza ha dado lugar a un trabajo de recopilación y catalogación (1) de las mismas a los fines de protección y reivindicación cultural. Por ello es que aquí aplicamos el nominal "yoga" tanto a las técnicas, a los sistemas como a las condiciones noéticas del practicante.
003.- ¿Qué ventaja tiene la lectura actitudinal sobre la que comúnmente se hace y piensa?
◘ Si son la actitud, el propósito y el estilo de vida y no las técnicas o doctrinas lo que definen el yoga; luego, si el practicante está imbuido de tales y cuales con la intensidad suficiente, puede por lo tanto transformar en yoga cualesquiera actos y prácticas que convencionalmente nadie osaría rotular de tal; por ej. el estudio de la matemática, de los fenómenos terrestres y celestes (mejor si en relación con nuestro comportamiento y prospecciones), un paseo peripatético con un amigo, esas entrevistas con un supuesto otro, o quizás una apacible práctica de natación. ¿No enseñaba ya Aurobindo que toda la vida es yoga?
004.- Tengo entendido, sin embargo, que en el Yoga hay estructuras, etapas, disciplinas y técnicas, todas ellas orientadas a propósitos específicos que van construyendo el efecto unitivo...
◘ Eso es cierto; pero, te pregunto: ¿podemos aislar acaso el designio funcional de su campo noético? Veamos. Cuando realizas un asana, un mudra, un pranayama o una meditación, el continuo de tu conciencia carga información y vehiculiza expectativa que no sólo te pertenecen, sino que han sido alimentadas y acumuladas por generaciones de mujeres y hombres que como tú (nosotros) abocados estuvieron (están) a conquistas espirituales. Esta carga no es en modo alguno epifenoménica; constituye empero un factor importante del efecto final. Disciplinas tan masivas como el fútbol o tan agraciadas como el ballet tienen sus propios campos y cargas. ¿Acaso no es un acto alquímico de gran envergadura que el estudiante los transforme en (o parte de) su yoga personal?
◘ Luego, como bien señalas, las técnicas yoga están especialmente diseñadas para ejercer cambios sutiles en los sistema nervioso, energético y otros niveles de realidad del viviente; pero esto no es sólo materia de la potencia de la técnica per se y su realimentación cibernética, sino que juega también lo suyo el campo noético que les acompaña y respecto al cual en el proceso te haces más sensible y participativo.
005.- Entonces, ¿cómo queda la relación entre técnicas y actitudes?
◘ Las técnicas son el vehículo y el pretexto para que entrenes una determinada actitud, una forma sabia de pensar y conducir tu vida. Mientras más atingente, potente y sostenible sea tu actitud y temperatura espiritual, menos necesidad tendrás de esos recursos (2); mientras más articulada esté tu performance técnica con la actitudinal y vital, más rápido realizarás el objetivo.
006.- ¡Uff!, ya creía que los scenios eran antagonistas con todo lo que oliera a técnicas.
◘ Nada más alejado de la verdad. Característico de la retórica scenia es afirmar medias verdades como si fueran absoluto-s para luego relativizarlas o corregirlas. Este servidor adopta el nivel metodológico (estratégico) como eje de gravedad para su práctica discursiva, con lo cual de algún modo colapsa o violenta los niveles metodopráctico (táctico, técnico), metodosófico (escolástico, doctrinario) y oratorial (realizativo), los mismos que a su tiempo relativizarían mucho de lo avanzado y nos iluminarían otras facetas, otras alturas. Si pudiéramos conducirnos directamente en el nivel oratorial (un aleph borgesino), luego no tendríamos la necesidad de palabras para poner en común un verso en toda su aspectualidad (3).
◘ Nuestro propósito ha sido, simplemente, desfetichizar. Lo que queremos como estudiantes es realizar que el yoga no está presente (aunque podría estarlo también, en segundo plano) en el arsenal de técnicas, unas más accesibles que otras; que el yoga surge de la relación dinámica entre un practicante y su instructor ... y su tradición ... y su encargo social y cósmico; que no necesariamente encontrarás yoga en un salón de blancos atuendos y estilizadas poses; probablemente sí en un entrenamiento musical. Y si continuáramos este andar sustituiremos la sed de técnicas por sed de experiencias constructivas de las que las primeras son el anclaje; entonces nuestro avance en el yoga será mayor, sus pasos más largos y firmes. Recuerda finalmente que no es el yoga una formulación mecánica sino un arte sagrado.
007.- Todavía no me daré por satisfecho. Entendido que el marco yóguico comprende componentes teleo-noéticos, tradicionales y doctrinarios, actitudinales, experienciales y técnicos, ¿por qué ponderar a unos más que otros en su definición?
◘ ¿Has oído a las vegetarianos que ordenan carne vegetal con sabor a pollo, pescado o vaca? Se han sustraído del objeto cárneo, pero todavía conservan estos engramas en su conciencia, los que por momentos parecieran más difíciles de erradicar. No te escandalices si te digo que alguien puede permanecer vegetariano aún con eventuales ingestas carnívoras si ha conquistado la actitud vegetariana. Porque su organismo dentro de ciertos límites procesará el alimento extraño como si de una dieta vegetal se tratara (4).
◘ Con el Yoga ocurre algo similar. Su residencia está en los estados existenciales de la conciencia. No es que no haya yoga en las técnicas y los métodos y las doctrinas, ni que sus devotos dejen de percibir resultados. Lo que sucede es que urge centrar nuestra atención en las relaciones yóguicas, las experiencias yóguicas, las actitudes yóguicas y los propósitos yóguicos como los operadores propios del yoga.
◘ Si en algo puede serte útil, Carlos Castaneda en su definición del "nagualismo" otorga decidida importancia a la movilización del "punto de encaje" del aprendiz. Su obra no es otra cosa que la exposición autobiográfica de fenómenos asociados con la movilización de dicho punto de encaje, inducida transaccionalmente. Esto tiene su contraparte en la movilización de los puntos de fijación concepcional y actitudinal del estudiante de Yoga (5). Espero que con estos insumos puedas elaborar tu propia respuesta.
008.- ¿Cómo vio el Yoga la luz?
◘ El origen del Yoga se pierde en la noche de los tiempos. A ella contribuyeron la empiria, la observación e investigación cuidadosas, la revelación y la transmisión de otras civilizaciones. El Yoga no está estancado a un molde escolástico. Su generación no se ha detenido, sino que continúa con las investigaciones, sistematizaciones y realizaciones de dedicados maestros y estudiantes (las proyecciones de las instituciones discipular e iniciática). Y lo más importante, llegado un punto es el mismo Yoga en ti (una sagrada inteligencia de alcance cósmico) que te iniciará en otras facetas y profundidades del Yoga, las que hacen de tu alma iluminada coadyuvante de la voluntad cósmica.
009.- ¿Es el Yoga de origen indio?
◘ Secularmente hablando, el Yoga floreció en una región geoconciencial correspondiente a las actuales India, Pakistán y Tíbet. Aunque el origen indio de la disciplina es de generalizada aceptación, un Orador del Yoga, el maestro David Ferriz Olivares, llegó a plantear la hipótesis de su origen americano. Independientemente de la validez de este aserto (una materia de investigación trascendental), nosotros destacamos su espíritu.
◘ Al sentir scenio, el origen del Yoga, con independencia de su epicentro geográfico, tiene lugar en la conciencia humana, sea como dispensación transvolutiva (6) o como construcción evolutiva de una conciencia desarrollada y, pudiendo ser ésta (léase a discreción: el/la portador(a) de la conciencia que accesa) ciudadana de otra región geoconciencial u otra cultura, no tiene por lo tanto por qué restringirse al molde índico.
010.- ¿Es el Yoga una religión?
◘ Si por religión entendemos un cuerpo de dogmas e instituciones que parametran los contenidos y el ejercicio de la fe centrada en una realidad primigenia y trascendental, luego el Yoga no es una religión. Si por religión rescatamos su significación etimológica (del latín, "religare" = ligar), luego el Yoga es la esencia de la religión.
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