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*** En la tercera sección de esta obra, nuestro autor expone su cosecha filosófica con ojos de ocultista ilustrado, revelándonos la personal y no poco controversial posición ante los temas y problemas de su revista. Así, en el capítulo 15 asistimos a una certera crítica de la moral efectiva de la sociedad contemporánea y sus instituciones (científicos incluidos), doble y enfermante; venero de patologías físicas, mentales y espirituales a las que, cínicamente, ésta (la sociedad) no vacila en señalar y castigar. El autor se vale del modelo de la fisiología de los chakras y bajo esa òptica muestra nuestro desequilibrio (depolarización, diría él) al vivir vidas que hipervolan - con su hambre por el sexo, la competitividad y el poder - los chakras inferiores. En el fondo, DeGracia busca reivindicar y compensar al ocultismo por la carga negativa que secularmente ha tenido que arrostrar por las injustificadas intrigas que un poder establecido le atribuyera, cuando una revisión de sus postulados lo revela como profundamente integrado, equilibrado y armonioso.

*** En el capítulo 16 critica aquella actitud científica que corta cabezas de metafísicos, religiosos y ocultistas y empequeñece y humilla sus aportes cognoscitivos en comparación con los de la empresa científica, que toma sus pequeñas aunque bien ganadas victorias como el 'Plan de Dios en la Naturaleza', haciendo gala de un orgullo y pretensión que enmascara el miedo e incertidumbre ante lo desconocido. Toda esta reflexión se inspira en el Libro de las Mentiras, Cap. 6 -"Caviar"-, de Aleister Crowley.

*** A estas alturas del recorrido; Tú, lector amigo, habrás percibido cuánta excentración se ha permitido nuestro guía respecto del espíritu académico convencional. Quizás te estés preguntando a qué coste profesional, personal incluso... Y no se te habrá pasado por alto que el viajero que visita tierras exóticas (cada cual con su lógica, atractivo y riesgo propios), esforzándose por superar una pretendida inconmensurabilidad (desde los puentes que interconectan sus estructuras profundas) ha conquistado un horizonte visional tal que exigirá más a las particulares versiones institucionalizadas (sumergidas, posicionadas) del Saber, por si no se inmuniza totalmente del cierre categorial de sus idiosincráticas fronteras. Ya sabemos cuál es la posición de DeGracia ante la ciencia oficial; Pero, ¿cuál ante los ocultismos y la misma empresa de síntesis? Los dos capítulos que siguen son reveladores al respecto: En el 17, jugando a intérprete de Seth, nos presenta un escenario en el cual los humanos dejaremos la urgencia por creer en nuestras construcciones mentales más allá de lo que ellas son en realidad: "construcciones mentales", y nos abocaremos a la multidimensionalidad de la experiencia. El capítulo 18 tiene el atractivo de perifonear su alma. En lo que sigue, parafraseo algunas de sus moralejas en cuanto creo aprehenderlas:

1.- Antes que la palabra está la experiencia; antes que las creencias, doctrinas, historias y explicaciones, está la vida. Ninguna de aquéllas puede englobar éstas, ninguna puede sustituirlas.
2.- Si nos sentimos a gusto o disgusto con una filosofía o doctrina dada, ello débese no a su verdad o falsedad intrínsecas, sino a nuestra subjetividad en tanto se ve afectada por sus implicancias.
3.- Las ideas son para usarse y no para esclavizarnos. Preocupémonos pues, por expandir nuestro ser antes que engordar a los dogmas (vengan de donde vengan), a costo de nuestra contracción en un universo cerrado y, por último,
4.- Seamos creativos.

En conclusión, si lo admitimos como modelo, ni su devoción teosófica, ni su embeleso Sethiano, ni su fervor cuántico-fractálico-caótico podrán ser más que instrumentos para su articulación personal. Ni aún esta última, cualquiera que sea. Una triste indiferencia no es lo mismo que una sabia indiferencia; pero aún este plano se precipita en un actuar, aunque sea por distracción — parece puntualizar.

*** Una preocupación que ha acompañado al autor a lo largo de su travesía es el 'significado-último-de-las-cosas' y es en el penúltimo capítulo que se atreve a dar cuenta de su conclusión. Una parece ser su respuesta, intrínsecamente trascendental, pero presentada en dos versiones: la primera, en clave cósmica; la segunda, en clave individual. Y las dos impresionan coincidir. Por un lado, a través de un ejercicio mental de excentración progresiva vamos expandiendo nuestras consciencias en la vivencia de múltiples y disímiles experiencias, hasta alcanzar la mística unidad con el Universo. Por otro lado, y como equivalente a la anterior, rasgamos el velo del templo y despertamos del estado hipnótico que suponen nuestras historietas propias o apropiadas, y descubrimos al sujeto que está por detrás de todas ellas: nosotros mismos. En ambos casos, ya las palabras, ya los argumentos, ya las ondas portadoras, etc., dejan de ser absolutas, importantes... se desvanecen en su relatividad. Ahora sólo importa la esencia: el NOS... el YO ... el UNO.

*** Todo este proceso de revelación ha sido orquestado por la música de científicos y ocultistas - escrita en los pentagramas de las ecuaciones y experimentos de laboratorio en un caso, y en las doctrinas y disciplinas en el otro -. Pero tales armónicos de vibración no son más que reflexiones de la EXISTENCIA y la VIDA que descansan en la NATURALEZA, mapas mutuamente alternativos, complementarios e integrativos que siempre se verán superados por el territorio.

*** En el capítulo final, creemos percibir en DeGracia una representación fractálica, dinámica y difusa del sistema Realidad - Conciencia, ambas matrices con potencial ilimitado en su autopoiesis; aunque nos desconcierta la cuestión de sus posiciones relativas (que - si aplicamos DeGracia a DeGracia - estará mediada para Nos. por una buena "historia"). La Realidad es, con todo, más rica que cualquier sistema de ideas o historias que podamos entretejer, y ante ella palidecen mortecinos con todo lo grandes que son: Seth, Besant y Leadbeater, Rudhyar, la perspectiva cuántica y las muchas otras presentadas (y olvidadas) en sus páginas. Dos recomendaciones hace nuestro autor: 1).- que las percibamos a cada cual en sus propios términos, y en sus propios términos exploremos las avenidas que se nos abren para auscultar el mundo. Pero, 2).- que haciendo eso, nunca olvidemos que se trata "simplemente" de historias. Hasta aquí el libro //.

*** A nosotros nos intrigan las preguntas de impacto, aquéllas del tipo: ¿qué recepción ha tenido esta obra en las comunidades académicas y ocultistas?, ¿cómo ha sido la [evolución de la] respuesta del lector general desde su difusión? Para darnos una idea hicimos un sondeo muy oportunista en nuestro imaginario y encontramos a quienes se entrecruzaron de brazos (por indiferentes o empachados: la materia estaba más allá de lo que les permitía sus marcos mentales); otros (un buen número) aparecían encandilados o prudentes pero deseosos de saber más; hubo quienes nos dijeron que se incurría en una psicologización, una sociologización (por tanto, degradación) de la física y la matemática y una caricaturización posmoderna de las ciencias del comportamiento; los menos, señalaron que se satisfizo uno de los propósitos de la Teoría de Sistemas: integrar las distintas especialidades en un marco único de principios sin atentar contra la especificidad de cada nivel de complejidad. ¿Y tú?, ¿gustas sumarte a nuestra pesquisa?

*** Procedemos a cerrar con un sentimiento de desasosiego por nuestro pasivo (léase: vacíos, subexposición de planteamientos y distorsiones potenciales de la lectura); pero nos consuela la esperanza de que muchos de los que nos obsequian con su virtual audiencia leerán y enjuiciarán directamente el libro. [♫]

Revisión por: Eduardo Mendoza M.
Urania Scenia & Itipcap, Junio de 2007.
Advertencia: Esta es una reseña no oficial, por lo que puede tener errores de interpretación.

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Nota: Para esta reseña se ha empleado el texto:
DeGracia, Donald J.(web ed. 2000): "Beyond the Physical. A Synthesis of Science and Occultism in Light of Fractals, Chaos and Quantum Theory ".
Visite la página de Donald J. DeGracia en http://www.geocities.com/ddegraci y allí podrá encontrar éste y otros importantes textos de su autoría.

Recomendación: Sugerimos al lector interesado la novela de Umberto Eco: El péndulo de Foucault (particularmente su sección final), para una lectura en paralelo. De allí, contrastar visiones y actitudes hacia la ciencia, el ocultismo y su síntesis.

Exponente avanzado de la síntesis de Ciencia y Ocultismo. Es Profesor Asociado en la Wayne State University, de Detroit, Mich. Destaca por su familiaridad con los estados alterados de conciencia, su amplio background científico-cultural y su crítica posición respecto de la Parapsicología. Ha realizado diversas publicaciones de investigación en el área médica. Entre sus obras podemos citar:

• Do OBE .
• Beyond the Physical.